Las elecciones del 20 de diciembre en Navarra han provocado un cataclismo. Podemos ha irrumpido con fuerza en el panorama política navarro y consigue dos diputados, logrando más de 80.000 votos y desposeyendo a EH Bildu y Geroa Bai del parlamentario que consiguieron en las últimas elecciones generales.

Los resultados son clarificadores:

 UPN-PP: 101.901 votos, 28,93% y 2 diputados. En 2011 126.516 votos, 38,2% y 2 diputados

 Podemos: 80.961 votos, 22,99% y 2 diputados

 PSN-PSOE: 54.700 votos, 15,53% y 1 diputado. En 2011 72.892 votos, 22% y 1 diputado

 EH Bildu: 34.856 votos, 9,9%. En 2011 como Amaiur 49.208 votos, 14,86% y 1 diputado

 Geroa Bai: 30.554 votos, 8,68%. En 2011 42.415 votos, 12,8% y 1 diputado

 Ciudadanos: 24.815 votos, 7,05%

UP-IU: 14.489 votos, 4,11%. En 2011como IE 18.251 votos, 5,51%

La participación fue del 74,2% frente al 68,9% de 2011, también se han reducido sensiblemente los votos blancos y nulos.

 Navarra partía de un proceso electoral como fue el de las elecciones forales y municipales del pasado mes de mayo en las que se vio claro que era posible el cambio. Se consiguió echar del gobierno foral y del ayuntamiento de Pamplona a UPN-PP, los representantes de la burguesía, herederos de los represores franquistas. La fuerza de este proceso ha propiciado que ahora hayamos visto un cambio importante en la composición del voto en Navarra y que refleja el mismo giro a la izquierda que hemos visto en el resto del Estado, aquí la izquierda ha sacado el 52% de los votos. Aunque no se pueden comparar ambas elecciones sí que se pueden sacar algunas conclusiones interesantes.

 UPN-PP y PSN retroceden

El domingo los dirigentes de UPN-PP estaban muy contentos, a pesar de perder el 10% de los votos respecto a 2011, porque consiguieron dos diputados cuando había encuestas que les daban sólo uno. Por otro lado, según ellos, los electores habían dado la espalda a EH Bildu y Geroa Bai que son quienes están al frente del gobierno de Navarra y el ayuntamiento de Pamplona. De hecho están lanzando toda su artillería para ver si les desgastan y caen abatidos.

También los dirigentes del PSN-PSOE se mostraban contentos ya que, aunque han sido los peores resultados de todas las elecciones generales celebradas hasta ahora, han mantenido un diputado que muchas encuestas descartaban. Siguen en caída, pero todavía aguantan, sobre todo en la Ribera donde el recuerdo de la lucha contra los caciques de principios del siglo XX todavía está presente. En mayo bajaron a la quinta posición, pero ahora se han recuperado superando en votos a EH Bildu y Geroa Bai.

Derrota de la izquierda abertzale

Estos, sobre todo EH Bildu, han sido los grandes perdedores, se han quedado sin la representación que tenían en Madrid y en conjunto han perdido más de 25.000 votos que parecen haber ido a Podemos. En sus primeras valoraciones, algunos de sus dirigentes hablaban de que estas elecciones se deben entender en clave estatal, por eso los electores se han inclinado más hacia un partido que, aunque sea unionista, habla del derecho de autodeterminación, derechos sociales, etc. Pero después de las críticas que se están produciendo entre la base de la IA, algunos como el parlamentario foral Adolfo Araiz, han manifestado que “sin ningún tipo de maquillaje, estos resultados no han sido nada buenos para EH Bildu, han sido muy malos”. Después defiende abrir un proceso de reflexión para ver por qué no han sido capaces de mantener la representación institucional. Mientras continúen reflexionando y no saliendo a la calle a reivindicar mejoras para los trabajadores y los jóvenes seguirán perdiendo votantes.

Podemos arrasa en las zonas obreras

El partido que ha triunfado en Navarra ha sido Podemosm aunque no es el más votado (otro gallo hubiese cantado si se hubiera logrado la confluencia con Unidad Popular que consigue 14.489, o con la propia izquierda abertzale), pero tener más de 80.000 votos y ser la primera fuerza en prácticamente todos los pueblos obreros de la Cuenca de Pamplona (Barañain, Burlada, Zizur Nagusia, Egües, Berriozar, Orkoien, etc.) es un tremendo resultado para una fuerza que no tiene ni dos años de existencia. También son los más votados incluso en los pueblos donde ganó Bildu en las elecciones forales, como Villava, Ansoain, etc. y hasta en pueblos donde siempre ganaba UPN como Noain. También, fuera de la comarca de Pamplona, en Alsasua, Bera, Tafalla, pueblos que en las municipales Bildu fue la más votada.

En Pamplona han sido los segundos después de UPN, pero han sido primeros en los barrios obreros de Txantrea, Rotxapea, Sanduzelai, Buztintxuri, Arrosadia, y en los de reciente construcción como Mendillorri y Sarriguren donde hay muchos matrimonios jóvenes, las nuevas capas del proletariado.

Los resultados representan un vuelco importante y se tendrán que consolidar con una política de lucha y defensa de los intereses de los trabajadores, “de la mayoría de la gente” como se encargaba de recordar Laura Pérez la secretaria general del consejo ciudadano de Navarra.

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