(...) “La emisión del primer reportaje (Efectos de Uranio Emputecido) cayó como una bomba. Me llamaron hasta catedráticos de la facultad de periodismo para darme la enhorabuena y por la valentía. Y muchos más mensajes de apoyo. Ese reportaje no lo habían supervisado en la dirección de informativos, aunque creo que la presentación de Angels Barceló dejaba bastante que desear. No lo he visto todavía, no he tenido tiempo para ver mi propio trabajo en emisión.

Hasta ayer, que viendo “mi informativo” se me revolvieron las tripas. (...)

Yo no lo entiendo, no me cabe en la cabeza que un gobierno tenga la desfachatez de meterse de esta forma en un medio de comunicación privado. (...)

Hoy se emitirá un reportaje vomitivo sobre la figura de Sadam Husein. No por lo que cuentan de él, que no lo defiendo, sino por cómo se va a hacer y en qué momento. Para compensar a los de arriba de mi trabajo que tanto daño les hace. Por supuesto, el último reportaje que había preparado, sobre Tamuz, las manifestaciones y la entrega de material médico, no se emitirá. (...)

P.

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Desde mi modesta opinión de productor y la de P. desde su puesto de cámara, queremos hacer nuestros todos los comentarios de nuestro amigo P. sobre la “Libertad de Expresión” de la que tanto se jacta nuestra empresa y deciros que desde este viaje nuestro compromiso con el pueblo irakí llega mucho más lejos que el necesario para cumplir con nuestro trabajo. Habrá que resignarse a ver la verdad de la CNN y de Moncloa pero nunca nos resignaremos a ser corderos de un rebaño de “Periodistas demócratas” que no son otra cosa que la voz de su amo.

No nos callarán

P. y J.