No a la represión sindical
Durante el mes de agosto la plantilla de LAVACHEL ha protagonizado una dura huelga en demanda de un convenio justo. LAVACHEL es una de las lavanderías industriales más importantes de Asturias y se encarga, entre otras cosas, de lavar la ropa de numerosos hospitales públicos. Las condiciones laborales en la empresa, cuya plantilla está formada fundamentalmente por mujeres, son escalofriantes: jornadas y ritmos de trabajo agotadores, total ausencia de derechos sindicales, precariedad e insalubridad en el desempeño del trabajo... todo ello por el salario mínimo interprofesional, 570 euros mensuales, que se redondea por el prorrateo de las pagas extra.
Hace pocos meses fue constituido por fin un comité de empresa, que presentó una plataforma reivindicativa para poner fin a esta situación. Entre otras cuestiones, reclamaban un salario bruto de 800 euros, calendario de vacaciones, aumento del precio de la hora extra, etc. La cerrazón del empresario, Jorge Gumiel, obligó a la convocatoria de una huelga indefinida que fue mayoritariamente aprobada en asamblea.
Durante la huelga hubo todo tipo de amenazas, coacciones e irregularidades, tanto por parte de la empresa como de la inspección de trabajo, y, lamentablemente con la connivencia de las direcciones de los sindicatos UGT y USO (los únicos con representación). Provocaron el miedo y el enfrentamiento entre los trabajadores, hasta el punto de que, recientemente, la huelga fue desconvocada en una asamblea donde se negó la palabra al comité de huelga y se prohibió a las miembros del comité de empresa presidir la asamblea.
Por cuestiones de espacio no es posible explicar detalladamente el desarrollo del conflicto, pero pueden consultarse los artículos sobre este tema en www.elmilitante.org. Actualmente, las trabajadoras más activas y por supuesto las pertenecientes al comité de huelga se enfrentan a una situación de acoso y represión laboral intolerable. Debemos evitar que estos atropellos se continúen realizando entre las cuatro paredes de la empresa, por eso pedimos que se envíe la resolución de protesta cuyo texto también se encuentra en nuestra web para exigir el cese inmediato del acoso sobre estas compañeras.