El Ministerio de Educación aprobó el 17 de diciembre un severo endurecimiento del acceso a la universidad para los estudiantes de Ciclos Formativos de Grado Superior (CFGS), imponiendo de hecho la selectividad para los estudiantes de Formación Profesional este mismo curso, un nuevo obstáculo para que los hijos de los trabajadores puedan ir a la universidad.
Endurecimiento de la selectividad
Hasta ahora, los titulados en CFGS accedían a la universidad sin hacer ninguna selectividad, siempre que superaran la nota de corte específica para los estudiantes procedentes de FP. Una nota muy elevada en las facultades con más demanda, como por ejemplo, Enfermería y Odontología, en algunos casos superior al 9. Ahora, la nota de acceso será la media del ciclo formativo (diez puntos) y una selectividad de dos exámenes "voluntarios", que sumarán de dos a cuatro puntos dependiendo de cada universidad. Esto significa que los estudiantes de CFGS, que en el mejor de los casos hace dos años ya que aprobaron el bachillerato, se tienen que examinar de dos asignaturas de bachillerato que ni siquiera forman parte del temario del ciclo formativo que están cursando.
Mientras el gobierno hace campañas publicitarias para "dignificar la FP", en la práctica la condenan de antemano con el déficit de inversión y plazas públicas. Pero además con esta nueva selectividad transmiten la falsa idea de que los estudiantes de CFGS no están preparados para ir a la universidad. Este endurecimiento del acceso a la universidad complementa la implantación del nuevo modelo de selectividad que el gobierno llevó a cabo el curso pasado, y que da más valor a los exámenes de selectividad (hasta 8 puntos), frente al bachillerato (con un máximo de 6 puntos).
Este reforma ha supuesto la devaluación del bachillerato en la medida que cuenta mucho menos en la nota final que la selectividad, y en la medida que no ha aumentado el número de plazas en la universidad pública, la subida de notas (sobre 14 en vez de sobre 10) ha significado un aumento igual de importante de la nota de corte.
Contra los intentos de división entre estudiantes de Bachillerato y Formación Profesional
En 2010 se suprimió el sistema de cuotas por el cual se reservaba un porcentaje de plazas en la universidad (20% de media) a estudiantes procedentes de CFGS. Los medios de comunicación y el Ministerio han centrado su atención en algún caso concreto para vender la imagen de que los estudiantes de FP eran unos "privilegiados" porque no hacían selectividad y estaban "acaparando" las plazas universitarias. Para ello utilizaban ejemplos como el caso de Educación Infantil en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), donde el 90% de las plazas han sido ocupadas por estudiantes procedentes de CFGS. Pero lo que no decían es que esto no es ni de lejos lo generalizado; de hecho, se pueden encontrar casos en sentido contrario más acentuados, como sucede en la misma UAB en la carrera de Veterinaria, donde de las 140 plazas de primero en 2010, sólo una ha sido ocupada por un estudiante procedente de CFGS, es decir, un 0,7% de las plazas.
El objetivo del Ministerio de Educación es claro: enfrentar a los estudiantes de Bachillerato y de Formación Profesional para que no luchemos conjuntamente contra el endurecimiento de la selectividad, que es un ataque al conjunto de los estudiantes de familias obreras, un nuevo intento de elitización de la universidad a través del endurecimiento del acceso.
En la Comunidad Valenciana el gobierno del PP intentó aplicar la misma medida a finales del curso pasado, y la respuesta rápida y contundente de los estudiantes consiguió que se retirara. Ahora se trata de un ataque a los estudiantes de todo el Estado, así que la respuesta debe estar a la altura del calado y envergadura del ataque. Por esto el Sindicato de Estudiantes convoca una jornada de acción estatal de estudiantes de CFGS contra la nueva selectividad el 16 de febrero con concentraciones en Barcelona, Sevilla y Córdoba y con asambleas en el mayor número de institutos de FP en el conjunto del Estado. Hacemos un llamamiento a los estudiantes de bachillerato, ESO y FP de grado medio a participar en la movilización contra el endurecimiento de la selectividad. Para coordinar la lucha proponemos el reparto masivo de propaganda y la realización de asambleas de estudiantes en los institutos, donde además de discutir y votar la movilización del 16 de febrero y la plataforma reivindicativa, se formen comités de lucha, escogidos democráticamente, para coordinar e impulsar la movilización.
Aumento del número de plazas en la universidad pública
Este nuevo ataque está estrechamente vinculado a los planes de la burguesía de expulsar a los hijos de los trabajadores de la universidad. La imposición del Plan Bolonia ha confirmado nuestros pronósticos: aumento de tasas universitarias de hasta un 30%, reducción del presupuesto de las universidades públicas e imposibilidad para combinar estudios y trabajo. Ahora, el gobierno quiere incrementar aún más las tasas universitarias (como en Italia, Irlanda o Gran Bretaña), reducir el número de plazas e incluso cerrar universidades (la mal llamada "fusión de universidades").
El Sindicato de Estudiantes se ha opuesto enérgicamente al endurecimiento de la selectividad, así como a la imposición de dicha prueba a los estudiantes de CFGS. Pero para resolver la cuestión del acceso a la universidad sin caer en el cualquier enfrentamiento entre estudiantes de Bachillerato y de Formación Profesional motivada por la escasez de plazas, es necesario defender un aumento drástico del número de plazas universitarias y la supresión de la selectividad.
Desde el punto de vista de los grandes empresarios y banqueros, y del gobierno que se ha sometido a sus intereses, sobran licenciados puesto que el futuro que nos preparan es de paro y precariedad laboral. Pero no es cierto que sobren plazas o licenciados: faltan profesores en todos los tramos educativos, faltan trabajadores sociales y psicólogos, falta personal sanitario para acabar con el déficit de la sanidad y las listas de espera... Por esta razón, defendemos el acceso directo a la universidad habiendo aprobado bachillerato o FP superior, y la construcción de 250.000 plazas en la universidad pública para hacer esto posible.
Contra los recortes sociales: que la crisis la paguen los capitalistas
En endurecimiento de la selectividad forma parte de los salvajes planes de ajuste que está aplicando el gobierno para que la crisis capitalista la paguen la clase obrera y la juventud. Este curso ha habido más de 50.000 estudiantes no admitidos en la Formación Profesional a nivel estatal, decenas de miles de estudiantes estudian en barracones, y aumenta la masificación de las aulas por los recientes recortes de plantilla. Todas estas medidas van directamente contra la calidad de la educación pública, a la vez que favorecen a la educación privada concertada, que se beneficia de la falta de plazas (especialmente en FP y educación infantil) y la degradación de la escuela pública.
A los recortes sociales aplicados hasta ahora, se suma la reforma laboral aprobada en septiembre de 2010 (que abarata y facilita el despido) y el retraso de la edad de jubilación a 67 años y el recorte en pensiones, que el gobierno ha aprobado en enero, con el escandaloso beneplácito de los dirigentes sindicales de CCOO y UGT.
Dicen que no hay dinero, y que los planes de ajuste son indispensables para evitar que la crisis económica se profundice. Esto también es falso. Sí hay dinero, y lo tienen los banqueros y grandes empresarios. A los 150.000 millones de euros que el gobierno de Zapatero ha regalado a la banca en los últimos dos años, se suma un nuevo plan de ayuda a las cajas de ahorro de alrededor de 20.000 millones de euros más. Todo este dinero público debería ir a prestaciones por desempleo, educación, sanidad y pensiones; y no para garantizar los beneficios de un puñado de multimillonarios.
EN DEFENSA DEL ACCESO A LA UNIVERSIDAD PARA LOS HIJOS DE LOS TRABAJADORES
Ante la falta de plazas en FP
y la imposición de la selectividad
para los estudiantes de FP:
· Ningún estudiante no admitido en la FP pública.
· Aumento de las plazas en FP de grado medio y superior hasta cubrir la demanda existente.
· Eliminación de la selectividad para estudiantes titulados en CFGS.
· Acceso directo habiendo superado la nota de corte.
Ante el endurecimiento de la selectividad a los estudiantes de Bachillerato y la imposición a los de FP:
· No al endurecimiento de la selectividad.
· Ningún estudiante de bachillerato o de FP sin plaza universitaria pública.
· Supresión de la selectividad y acceso a la universidad en primera opción habiendo aprobado bachiller o CFGS.
Para lograr estos objetivos
el SE defiende:
· En lugar de entregar 20.000 millones de euros a las Cajas de Ahorros:
· El 7% del PIB a la educación pública.
· Plan de choque de 8.400 millones de euros para garantizar una universidad pública de calidad, con el que construir las 250.000 plazas universitarias necesarias para eliminar la selectividad.