A pesar de que el PSOE obtiene la mayoría absoluta en 32 municipios de las zonas más rurales, continúa perdiendo votos, tanto a nivel municipal como autonómico, donde pasa del 32,01% en 2012 al 26,45%, a pesar de que hay un incremento de la participación de más de seis puntos, mientras que la suma de Podemos e IU obtiene un impresionante 30,95% de los votos. En la capital, Somos Oviedo (Podemos) se convierte en segunda fuerza, con el 19,09% del voto y 6 diputados, frente a los 5 del PSOE. En Avilés, la suma de los concejales obtenidos por Podemos Avilés (5), IU (3) y Ganemos Avilés en Común (1) supera a los 8 del PSOE, que obtiene un 26,69% del voto y es superado ampliamente por el conjunto de fuerzas a su izquierda (35,34%). Y lo mismo ocurre en Gijón, donde Xixón sí Puede (también impulsado por Podemos) e IU obtienen el 29,51% del electorado y 8 concejales frente al 24,8% y a los 7 concejales del PSOE.
En municipios como Langreo, en la cuenca minera del Nalón, IU y Somos Langreo juntos obtienen la mayoría absoluta, desbancando al PSOE. Y en Mieres, IU consigue una histórica mayoría absoluta con el 49% de apoyo y 12 concejales, frente a los 4 del PSOE.
Desmoronamiento de la derecha
Frente a estos impresionantes resultados, el PP sólo gana con mayoría absoluta en seis municipios, y con mayoría relativa en otros cinco. Por su parte, Foro por Astu-rias1 (FAC) desaparece de la mayoría del panorama asturiano, y Ciudadanos obtiene unos resultados muy limitados en comparación a lo que las encuestas le auguraban. De hecho, en ningún municipio importante juegan ningún papel a la hora de formar gobierno.
A nivel autonómico, el desplome de la derecha es tremendo. Para comprenderlo en toda su dimensión hay que tener en cuenta que FAC arrebató al PP más de la mitad de sus votos en 2011, y que ahora que prácticamente han desaparecido (pierde casi 17 puntos porcentuales), el PP recupera poco más de 8.000 votos de los casi 80.000 que pierde Foro Asturias. Incluso con la entrada de Ciudadanos en el parlamento, que obtiene 38.197 votos, el 7,11%, y 3 diputados, la derecha (sumando PP, FAC y Ciudadanos) obtiene seis diputados menos que en 20112. En conjunto pasa del 50,11% en 2011 al 37,01% actual.
Por otro lado, el PSOE obtiene una victoria pírrica, con 14 diputados, 3 menos que en 2011. Podemos saca 9, e IU mantiene los 5 que tenía, lo que juntos les da un empate con el PSOE, a quien superan además en número de votos.
A la vista de esto, y al igual que ocurre con los resultados municipales, en nuestra opinión es indudable que una candidatura de confluencia en torno a IU y Podemos, apoyándose en los movimientos sociales que han sostenido la lucha en la calle en el último periodo, podría haber conseguido mejorar sustancialmente estos resultados, ya de por sí impresionantes, y conseguir la victoria no sólo en las principales ciudades, sino en la propia comunidad autónoma, desbancando al PP y al PSOE.
Porque hay que tener en cuenta que una candidatura de este tipo, como lo han demostrado Ahora Madrid o Barcelona en Comú, es mucho más que la suma aritmética de sus componentes, convirtiéndose en un referente claro para la mayoría de los trabajadores y de la juventud.
En todo caso, estos resultados suponen una victoria para las familias trabajadoras, y para todos aquellos sectores que han luchado en la calle contra los recortes, manteniendo el pulso ante los ataques durante estos últimos años, pese a la claudicación de las direcciones sindicales y a la complicidad habitual del PSOE allí donde gobierna, como el caso de Asturias o Andalucía.
Ahora será necesario que tanto Podemos como IU sean capaces de llenar de contenido estos resultados, dando una respuesta a los principales problemas que nos asfixian: el paro, la vivienda, la educación, la sanidad… Para ello será necesario, no sólo un programa claro y contundente, sino apoyarse en la movilización y la fuerza de quienes les han llevado a las instituciones, para vencer la resistencia no sólo de la derecha sino, muy probablemente, también de la dirección del PSOE.
1. Escisión del PP liderada por el exministro Álvarez Cascos, que en 2011 fue la fuerza más votada de la derecha por delante del PP.
2. Entonces, la suma de PP, FAC y UPyD les dio 23 diputados, frente a los 17 actuales.