Entrevista a Josep Garganté, delegado del comité de descansos por CGT de Transportes Municipales de Barcelona
El Militante.— ¿Cuándoarranca la lucha y cuáles son las reivindicaciones?
Josep Garganté.- Todo se remonta a la negociación del actual convenio hace más de dos años. En aquella negociación todas las plataformas sindicales de todos los sindicatos pedían los dos días de descanso semanal, que es lo que estamos exigiendo ahora. Después de un año negociando sin ningún tipo de movilización (la CGT convocamos algunos paros pero no hubo una respuesta masiva en ellos) el convenio que se sometió a referéndum era de muy bajo perfil, sin ninguna de las promesas que se habían hecho.
En el referéndum se pusieron dos urnas, una para los conductores/as (que son la gran mayoría de los trabajadores de autobuses de TMB) y otra para el resto de colectivos. Todos los sindicatos dijeron en una asamblea que si en una de las dos urnas salía que No el convenio no se firmaría. La urna de los conductores dijo que No, pero UGT, CCOO y el SIT juntaron los votos de las dos urnas y acabaron firmando el convenio. Nosotros le dijimos a la dirección de la empresa que era un convenio cerrado en falso y que acabaría estallando. Ellos contestaron que si podían firmar un convenio por 20 pesetas no iban a firmar uno por 50. Con ello quedaba claro que la empresa se estaba ahorrando mucho dinero con un convenio de mínimos.
Después de más de dos años de convenio y de cada vez más cabreo por la falta de descansos, los conductores/as comienzan a apretar a todos los delegados sindicales para hacer alguna cosa. Desde CGT vemos que el nuevo Real Decreto 902/2007 sobre descansos en el Transporte por la Seguridad nos abre la puerta legal par entrar a mejorar la falta de descansos que padece el colectivo.
Se inicia una campaña informativa como Comité de Descansos (Organismo que cuenta con delegados de CGT, ACTUB y uno del SIT) tanto dentro, como de cara al usuario. Notas de prensa, pancartas, carteles, adhesivos, octavillas, chapas, etc. También se empiezan a enviar cartas a todas las personas responsables que pueden ser parte de la solución. Desde el alcalde hasta el director general de autobuses. Desde todos los partidos políticos parlamentarios hasta los grandes centros comerciales. Desde la empresa y el ayuntamiento la respuesta es el silencio.
Así que hacemos la primera movilización el 21 de noviembre y todo el mundo se sorprende de la magnitud de la respuesta. UGT, que se había posicionado en contra, tiene que variar su discurso y de cara a la galería dice que aceptará lo que la Asamblea determine, aunque luego en la práctica, aunque la Asamblea dijo que adelante a las huelgas de Navidad, ellos se dedicaron a tratar de desmotivar y desmovilizar a la plantilla. CCOO, que había tenido una postura ambigua, también dice que está por la movilización, pero al igual que UGT van tratando de desanimar a los conductores/as. Desde CGT siempre hemos estado dando apoyo a este tema, pero es evidente que la fuerza reside en la plantilla de conductores/as, sean del sindicato que sean. Después de esa primera huelga de cinco horas y viendo que la empresa sigue con el mismo discurso de palabras vacías, comenzamos la segunda movilización, decidida por la Asamblea del 21 de noviembre, con 7 días de huelga para Navidad que fueron en cuanto a seguimiento un éxito total, a pesar del boicoteo de CCOO y UGT, de la presión policial de los antidisturbios y de la campaña de miedo de la dirección de la Empresa.
EM.- El seguimiento de las jornadas de huelga de diciembre y enero ha sido masivo. ¿Cuáles son los siguientes pasos previstos en vuestra lucha?
JG.- Ahora mismo, lo más inmediato es la manifestación de apoyo a la lucha de los conductores/as de autobuses de TMB y en contra de la paliza que le dieron varios Mossos al compañero Teo cuando estaba haciendo de piquete informativo. Esta movilización es el 9 de febrero en Plaça Universitat. Después tendremos un paro de 5 horas el 12 de febrero donde realizaremos una asamblea general de conductores/as y allí decidiremos, si la empresa y el Ayuntamiento no se mueven, de qué manera tiraremos adelante con la huelga indefinida.
EM.- El Ayuntamiento y la dirección de TMB tratan de confundir y engañar a la opinión pública e intentan desprestigiar al comité de huelga y a los conductores, hablando de "huelga radical". En una lucha como la vuestra, sacar el conflicto hacia afuera, conseguir el apoyo de la opinión pública y reforzar la solidaridad con la huelga, son elementos clave. ¿Qué estáis haciendo en este frente?
JG.- Está la manifestación del 9 de febrero, se están vendiendo chapas con el eslógan de los dos días y hay una cuenta corriente de apoyo. Hemos podido constatar que hay un sector de gente, de movimientos sociales, grupos políticos de izquierda, organizaciones sindicales, centros sociales, usuarios cabreados/as, etc., que entiende perfectamente nuestra lucha y no sólo eso sino que la hace suya, ayudándonos en todo lo que le ha sido posible. Estamos recibiendo muchas muestras de apoyo. Un ejemplo claro es que la idea de la manifestación del día 9 de febrero nos la da la gente y las organizaciones con las que hablamos. Los usuarios que trabajan y saben de sus propias condiciones y de lo difícil que es mejorarlas, entienden perfectamente que cuando un trabajador va a la huelga no es porque no quiera trabajar sino porque quiere hacerlo en mejores condiciones. En este sentido, la batalla por la gente de Barcelona la empresa y el Ayuntamiento la tienen perdida.
Seguiremos necesitando todo el apoyo posible.