Otros 900 empleos peligran en General Motors
La dirección de General Motors-Opel presentó el 10 de febrero el plan de reestructuración de su fábrica zaragozana. Como todo el mundo esperaba y los dirigentes de UGT y CCOO habían anunciado que aceptarían, incluye la eliminación de 900 puestos de trabajo y un ERE de siete meses para otros 600.
Otros 900 empleos peligran en General Motors
La dirección de General Motors-Opel presentó el 10 de febrero el plan de reestructuración de su fábrica zaragozana. Como todo el mundo esperaba y los dirigentes de UGT y CCOO habían anunciado que aceptarían, incluye la eliminación de 900 puestos de trabajo y un ERE de siete meses para otros 600.
Estas medidas serían lo que la empresa denomina "no traumáticas": 350 trabajadores irían al paro con el 80% del salario más antigüedad durante dos años y los 550 jóvenes con contrato de relevo al paro puro y duro durante 4 años conforme vayan venciendo sus contratos. Pasado ese tiempo, ambos colectivos volverían ¡con otro contrato de relevo! para sustituir a los trabajadores que vayan cumpliendo 60 años.
A cambio de estas "ventajas" -"un periodo sabático" dice la empresa en un comunicado- sólo pide la aceptación de unas medidas "técnicas" que, en la práctica, suponen la aceptación de un convenio draconiano: congelación de salarios y complementos por cuatro años, profundización de la doble escala salarial y flexibilidad total a la hora de trabajar los sábados.
Este es el último de una larga serie de ataques en GM. Siempre es lo mismo: la situación es muy mala y hay que apretarse el cinturón para garantizar la continuidad de la fábrica. Y cada vez los ataques son más fuertes. Como hemos expresado en las páginas de El Militante, el problema principal es la tibieza de la respuesta sindical ante tantas agresiones. Cada mejora para los trabajadores sale del bolsillo del empresario, y cada empeoramiento en nuestras condiciones le beneficia. Si la empresa ha venido obteniendo lo que busca con esta táctica, ¿por qué habría de cambiarla? Como llevamos años viendo, este ataque sólo es el preludio de más en el futuro. La debilidad invita a la agresión.
Hay que reforzar la unidad
El primer factor para luchar contra estos ataques debe ser la unidad en la plantilla y con el resto de la clase trabajadora. La experiencia ha demostrado que no sirve agachar la cabeza y esperar que el golpe se lo lleve otro. ¿O es que acaso los trabajadores de Amberes han sido menos trabajadores o más reivindicativos que los de otras fábricas del grupo? Figueruelas ya se vio amenazada de cierre cuando se negociaba el Meriva, y esto se volverá a repetir. ¿Qué solidaridad podremos esperar cuando esto ocurra si miramos hacia otro lado mientras Amberes cierra? Es ineludible una contundente campaña de solidaridad contra los despidos de Bélgica.
Por otro lado los relevistas han visto como el comité da por supuesto que saldrán de la empresa durante varios años. ¿Quién puede aguantar cuatro años en el paro a la espera de que la empresa decida cumplir el acuerdo? Fue significativa la ausencia de estos trabajadores en las asambleas del 13 de febrero. En caso de movilizaciones podrían formar parte del sector más combativo y decidido, pero siempre que se sientan parte de la plantilla y que se lucha por su futuro también.
Es necesario un programa y un plan de lucha
Son necesarias asambleas conjuntas de todos los trabajadores, afiliados a algún sindicato o no, para debatir los pasos a seguir. En nuestra opinión la reivindicación central debería ser que en GM no sobra ningún trabajador, y si falta carga de trabajo se debe reducir la jornada laboral sin reducción salarial. La empresa alegará sus supuestas "pérdidas", ante lo cual debemos pedir la apertura total de los libros de cuentas a los representantes de los trabajadores y, en caso de que los capitalistas no quieran garantizar algo tan básico como un puesto de trabajo o pretendan cerrar la fábrica la respuesta debe ser la nacionalización de la fábrica. GM ya está nacionalizada en EEUU, pero para garantizar los beneficios capitalistas. Queremos lo mismo pero para beneficio de toda la sociedad.