El Militante.— ¿Cuáles han sido los motivos que os obligaron a ir a la huelga?
Beatriz de Diego.— El impago de cuatro meses de salarios y una actitud reiterada de la empresa, Limpiezas América, de obviar nuestras necesidades durante tres años,
pagando casi siempre con mucho retraso.
EM.— ¿Qué plan de lucha propusiste como afiliada de CCOO?
BdD.— En primer lugar, mucho antes de la huelga y ante la actitud de la empresa ya había planteado la necesidad de afiliación al sindicato y la denuncia a Inspección de Trabajo, como medidas preventivas; posteriormente defendí la necesidad de la huelga. Hemos tenido mucha paciencia, demasiada. Llamamos a CCOO y nos plantearon la huelga conjunta con las trabajadoras de la empresa Ortiz, que también trabajaba para la Comunidad de Madrid (CAM) y que se encontraban en la misma situación que nosotras.
Desde las trabajadoras del IES Ramiro de Maeztu planteamos a CCOO concretar esa unidad celebrando una asamblea conjunta de los trabajadores de los institutos y centros culturales en los que estas empresas desarrollaban su actividad y una concentración. También propusimos crear una caja de resistencia que ya habíamos impulsado en el IES Ramiro de Maeztu y que ha funcionado muy bien, permitiendo desarrollar una fuerte solidaridad con los docentes y no docentes del instituto, y que en estos 14 días de huelga ha posibilitado que algunas compañeras pudieran costearse los abonos transportes y alguna facturas de luz o alquiler, etc. Había que enfocar la lucha partiendo de que no sólo éramos once compañeras y un instituto, sino que éramos 170 y 23 institutos. Manteniendo esta unidad a lo largo de toda la lucha, para que la CAM asumiera toda la responsabilidad, podríamos haber triunfado mucho antes. Pero esta fórmula no fue aceptada por la dirección de CCOO.
EM.— ¿Cuál ha sido la actitud de la dirección del centro?
BdD.— En todo momento, sabotear la lucha. En la primera etapa de los impagos, con el objetivo de controlar nuestra respuesta, se basó en la desinformación o la información sesgada. Nosotras nos planteamos la posibilidad de una huelga tras la reunión de un claustro de profesores en la que estos nos mostraron su apoyo pasando por encima de la presión de la dirección. En esa misma reunión se planteó una colecta de apoyo a las trabajadoras, con la oposición de la dirección, recogiendo 1.700 euros. Posteriormente, durante la huelga, la directora implementó todo tipo de medidas para romperla, entre ellas la utilización de servicios mínimos abusivos. La actitud esquirola de la directora del Ramiro llegó tan lejos que una de las medidas a las que recurrió fue la de utilizar a los alumnos más jóvenes para limpiar el instituto.
EM.— Cuéntanos un poco más de la solidaridad que habéis recibido.
BdD.— Como ya he señalado hubo una participación importantísima de los profesores, que realizaron una segunda colecta y participaron activamente en la lucha colocando un blog de limpiadoras del IES Ramiro de Maeztu en huelga, carteles y conexiones con prensa, radio y televisión. También destacar el apoyo estudiantil a través de La Demencia (aficionados del equipo de baloncesto Estudiantes) y el Sindicato de Estudiantes. Este último ha tenido una participación fundamental, distribuyendo panfletos informando de nuestra situación, del acoso recibido por la dirección del colegio y convocando concentraciones en la puerta del instituto. Además, llevó a cabo una campaña de solidaridad con resoluciones de apoyo de trabajadores, comités de empresa, delegados sindicales y dirigentes políticos (que se encontraban en plena campaña electoral) como Tomás Gómez o los dirigentes de Izquierda Unida, resoluciones que inundaron la Consejería de Educación y la dirección del centro.
EM.— ¿En qué situación os encontráis ahora?
BdD.— Es evidente que se hizo un gran movimiento y como producto del mismo y de toda la lucha decidieron venir a “dialogar” unos días antes de las elecciones. En un primer momento la mayoría de las compañeras queríamos mantener las medidas de lucha hasta que todas las promesas se vieran reflejadas en un papel firmado y sellado por la CAM. Pero hubo muchas presiones. Por un lado la dirección de CCOO que, a la vez que nos felicitaba ya que “hacía mucho que no veía una lucha tan ejemplar y fuerte como la nuestra”, planteó que había que levantar la huelga ya que tan sólo se quería presionar y eso se había logrado.
Luego, las presiones de la dirección hicieron mella especialmente en la encargada, que empezó a jugar el papel, en la práctica, de agente de la directora y finalmente afectó a las compañeras que se encontraban en situaciones extremas desde el punto de vista económico. En estos momentos nos encontramos en espera. Se está gestionando el pago a través del Fogasa por medio de la abogada de Limpiezas América y de CCOO, pero esto, aunque se realice en forma rápida, tardará unos meses.
Ahora ya nos han comunicado que para el 1 de junio tenemos empresa nueva, CLECE, que es bastante importante en el sector, y sabemos que ya han venido a ver el instituto y han solicitado los papeles. Hemos llegado a un punto donde parece que “ya está”, pero sin embargo “no está”, porque no ha firmado. Necesitan volver al clima anterior y que no nos sintamos fuertes, debilitar la idea de que se ha conseguido todo con la lucha, para que otra vez puedan imponer la situación de miedo e inestabilidad. Pero está claro que si el 1 de junio no hay empresa la respuesta no será de duda. Ya hemos roto la primera muralla de la represión en el IES Ramiro.
ÚLTIMA HORA
Al cierre de la edición las trabajadoras de la limpieza del IES Ramiro de Maeztu acaban de conocer que no existe ninguna empresa que se vaya a hacer cargo de su trabajo. Todo ha resultado ser un engaño urdido por la CAM y la dirección del centro para embaucar a las trabajadoras y que levantaran la huelga.
Las trabajadoras han iniciado inmediatamente distintas acciones de presión entre las que se encuentran denunciar esta maniobra en el instituto y volver a la huelga. Seguiremos informando en www.elmilitante.net y en el próximo número de El Militante.