El pasado 27 de junio Europastry despidió a la compañera Ivonne García Cabello, delegada sindical de Comisiones Obreras en oficinas. La empresa trata de presentar el despido como consecuencia de una falta muy grave supuestamente cometida por la compañera, aplicándole por ello un despido disciplinario.
Sin embargo, las acusaciones de las que ha sido objeto Ivonne son una burda manipulación de la realidad. La empresa pretende ensuciar la profesionalidad de la compañera en su puesto de trabajo para ocultar la realidad: el verdadero motivo que ha llevado a Europastry a despedir a Ivonne ha sido el trabajo sindical que venía realizando la compañera en los últimos meses.
Desde finales de noviembre Ivonne ha tratado de impulsar una candidatura de CCOO para las elecciones sindicales que tienen que celebrarse en otoño. La empresa tuvo conocimiento de este hecho y a partir de entonces Ivonne sufrió un trato injusto y discriminatorio por parte de sus jefes. La presión sobre la compañera se incrementó a raíz de la huelga convocada por CCOO y UGT el pasado 23 de mayo para defender el convenio de masas congeladas. Ivonne secundó la huelga y participó activamente en la misma y la empresa respondió con un hostigamiento más acusado. Llegado este punto, la compañera, con objeto de defenderse, envió un burofax a la empresa pidiendo que cesara la discriminación que sufría. Y la empresa reaccionó con el inicio de un expediente sancionador y el posterior despido disciplinario de la compañera acusándola de haber cometido adrede un error en la facturación para así dañar la imagen de la empresa, enviando el burofax para protegerse de esos hechos.
La empresa miente y no es la primera vez que actúa así con respecto a los trabajadores. Ivonne está sufriendo un caso claro de represión sindical. Europastry se suma así a la lista de empresas que persiguen a los trabajadores que luchan y que defienden sus condiciones laborales y su dignidad en el puesto de trabajo. La empresa no sólo busca apartar a Ivonne, también quiere amedrentar al resto de sus compañeras, darles un escarmiento para que agachen la cabeza y dejen de luchar. Con el despido de Ivonne, Europastry niega en la práctica dos derechos básicos y elementales: el derecho a organizarnos sindicalmente en la empresa y el derecho a participar en las movilizaciones legalmente convocadas. Quienes pretenden negar estos derechos esenciales con amenazas y despidos es porque quieren volver a unas relaciones laborales propias de unos tiempos pasados que sufrían nuestros padres y abuelos y que no vamos a permitir que regresen. Por todo ello el despido de Ivonne es un ataque a todos los trabajadores de Europastry. ¡Si nos tocan a uno, nos tocan a todos!
Por eso desde la Sección Sindical de Comisiones Obreras en oficinas, exigimos la inmediata readmisión de Ivonne García Cabello. Para defender a la compañera y conseguir su readmisión incondicional, el sindicato llevará a delante todas las medidas que estime oportunas.