La huelga de limpieza viaria y jardinería en Madrid capital entra en su noveno día. El seguimiento por parte de los trabajadores convocados sigue siendo unánime y la simpatía de la mayoría de los trabajadores madrileños con sus reivindicaciones, es inequívoca, a pesar de que la campaña desatada desde el primer día a través de los medios de comunicación contra esta huelga, está aumentando su intensidad cada hora que pasa. No es el único frente abierto que tiene el PP en Madrid; está la sanidad, el transporte público (metro y autobuses urbanos), la educación… La unificación de estas luchas en un frente común, en un contexto además en el que la base de apoyo al PP en Madrid, tanto en el Ayuntamiento como en la Comunidad, es mas reducida que nunca, podría ser la puntilla para hacer caer a estos odiados Gobiernos. Este es el momento, conseguirlo está al alcance de la mano. La responsabilidad de los dirigentes regionales de CCOO y UGT es ineludible, tienen el deber de dar rápidamente este paso. El pasado 8 de noviembre estuvimos reunidos con Juan Carlos del Río, Responsable de limpieza viaria de Madrid capital UGT. Con él estuvimos hablando sobre la huelga que en estos momentos están protagonizando y otras cuestiones.

EM.- ¿Cuales son las razones que os han llevado a ir a la huelga indefinida?

JC.- Las razones fundamentales son.- el expediente de regulación de empleo que nos quieren imponer y que afecta a 1135 compañeros; además en limpieza viaria pretenden una rebaja salarial en torno al 40%; a esto hay que sumar que hay 375 trabajadores de jardinería y limpieza viaria que fueron despedidos por las empresas a los pocos días de hacerse cargo del servicio y por último, no se han cumplido los acuerdos a los que ya se había llegado con estas contratas.

El origen de este brutal ataque es precisamente el contrato que presenta el Ayuntamiento de Madrid para el nuevo servicio integral. Este no garantiza el número mínimo de trabajadores. Como consecuencia las empresas se presentaron a la subasta con una oferta que reducía todavía más los costes. Las empresas que presentaron el presupuesto más bajo eran lógicamente aquellas que más trabajadores despedirían o más derechos quitaban.

EM ¿Cómo consideráis que está siendo el seguimiento de la huelga?

JC.- Prácticamente la totalidad de la plantilla está secundando la huelga, los que no lo han hecho representan un porcentaje testimonial.

EM ¿Habéis recibido algún tipo de respuesta por parte de la empresa?

JC.- No, la única respuesta que nos han dado en la mesa de los ERE, es rebajar los despidos de 1134 a 925 a cambio de que compensemos nosotros la diferencia con reducción de salario, en concreto con es una reducción adicional del 12 % y un Expediente de Regulación de Empleo Temporal de un mes para toda la plantilla.

EM.- El ayuntamiento dice que esto es un conflicto entre las empresas y sus trabajadores, ¿qué pensáis al respecto?

JC.- Probablemente sea así, pero es un conflicto generado por ellos, al no mantener como he dicho antes, un número mínimo de trabajadores para mantener el servicio. Pero quizás habría que ir más allá. Lo que es indudable es que es un conflicto que ha entreabierto la lucha de clases y la han reabierto ellos; es un intento de quitar los derechos de los trabajadores y tener una clase obrera subyugada.

EM.- Ya ha empezado la campaña, a través de los medios de comunicación, para criminalizar vuestra lucha e intentar poner contra vosotros a la opinión pública; ¿tenéis prevista algún tipo de medida para contrarrestar esta campaña?

JC.- Sí, precisamente hoy tenemos una reunión todos los sindicatos para unificar propuestas. Nosotros lo que queremos es acordar acciones para que las llevemos a la práctica todos los trabajadores. Se trata de unificar las acciones por encima de sindicatos, todos los trabajadores unidos en un plan de acción que nos movilice a todos. Tener un plan organizado y que todo el mundo tenga un plan de acciones.

Hay varias propuestas, como ir a donar sangre a un hospital, irnos a invitar con nuestros termos a un café con leche a todos los vecinos en distintas partes de Madrid; vamos a plantear hacer asambleas permanentes en los centros de trabajo por si hay que modificar alguna cuestión; también hacer asambleas explicativas a los trabajadores para informar puntualmente de como va la negociación con las empresas, en el caso de que esta empiece, ya que hasta ahora no ha habido realmente negociación.

Queremos hacer también mesas explicativas, en la línea que vosotros apuntáis muy bien, en los puntos estratégicos de Madrid, intercambiadores, etc, para recoger firmas y dar hojas informativas explicando los motivos de la huelga.

Efectivamente como tú muy bien dices, hoy nos está tocando a nosotros, anteriormente ha tocado a sanidad, educación; están fraccionando a la clase obrera en trocitos y nos están merendando uno a uno. Está claro que algún día deberemos tomar todos conciencia de ello y dar una respuesta colectiva.

EM.- Es indudable que este es el punto. Los sindicatos son confederaciones por una razón objetiva. La existencia del sindicalismo de clase parte de la necesidad de dar una respuesta conjunta de toda la clase obrera contra ataques que tienen un denominador común, el intento de los grandes empresarios de seguir amasando beneficios a costa de los trabajadores y del dinero público.

En este sentido, ¿no os parecería necesario, como un paso decisivo en el camino hacía esa respuesta colectiva, plantear, a través de las estructuras de los sindicatos, una campaña de resoluciones de apoyo a la huelga, en secciones sindicales, comités de empresa, asambleas de trabajadores, para además enviarlas vía fax o email al ayuntamiento y las empresas?

La pesadilla de las empresas y del gobierno central, autonómico y municipal es la unificación de todos los conflictos y usan todos los medios a su alcance para intentar aislar las luchas, que estas se enquisten, es necesario que actuemos en la dirección contraria, al fin y al cabo la lucha es la misma y su origen es el mismo.

JC.- Estoy de acuerdo. Es más, lo voy a proponer en la reunión que tenemos ahora.

EM.- Consideramos que tenéis un punto de partida muy positivo; de hecho ya ha habido secciones sindicales, que por iniciativa propia, han aprobado resoluciones de apoyo, como por ejemplo la de UGT de los trabajadores laborales del ayuntamiento de Madrid.

JC.- Es cierto. El temor que tienen es que las luchas se extiendan. Ellos quieren que pensemos que hagamos lo que hagamos no podremos cambiar las medidas que quieran implementar las empresas y los gobiernos. Nosotros tenemos que insistir en todo lo contrario, es decir, la lucha sirve, siempre ha servido y siempre servirá, puede pasar que las victorias no siempre se consigan inmediatamente, pero bueno, la lucha en sí misma es necesaria. Si no luchamos nos aplicarán los despidos, las bajas salariales y tendremos una clase obrera totalmente domesticada, y además con riesgo de exclusión social. El hecho de estar trabajando no va a solucionar nada en ese sentido, por ejemplo, cobrando  el SMI, no te garantiza por ejemplo la vivienda.

EM.- Ánimo, estamos con vosotros en la defensa de los empleos y de un salario digno.