En ese año se sucedieron huelgas y movilizaciones en el sector de la minería privada, en protesta por el uso del carbón de importación. Durante dichas protestas fue volcada la carga de uno de estos camiones en la calzada, sin que ni la Guardia Civil ni los transportistas pudieran identificar a los autores.
Sin embargo, el mero visionado de un vídeo colgado posteriormente en Youtube ha servido para condenar a prisión a estos dos compañeros, lo que demuestra, una vez más, que lo importante es “dar ejemplo” y amedrentar al conjunto de los trabajadores para que nos lo pensemos dos veces antes de movernos.
Ya sucedió también con otros cinco mineros de la localidad de Zarréu, condenados a penas de prisión por enfrentarse al ingeniero durante un grave accidente que este último pretendía encubrir. Por supuesto el ingeniero, que pudo haber causado graves lesiones o incluso la muerte de sus compañeros, se va totalmente de rositas. Lo mismo sirve para el empresario del astillero privado Armón, donde hace pocos meses fallecía el tercer trabajador en menos de año y medio. Aún estamos esperando que haya alguna sentencia condenatoria para todos los empresarios y directivos responsables de la muerte de trabajadores en su puesto de trabajo. Pero la justicia no está para eso, sino para utilizarla como una maza contra las espaldas de nuestra clase.
Y la actitud totalmente pasiva frente a estas agresiones de nuestros dirigentes sindicales, no hace sino facilitarle la tarea al aparato del Estado. Desde GanemosCCOO creemos que es hora de pasar a la ofensiva. Como no nos cansaremos de reclamar desde estas páginas, el único arma contra la represión es la unidad, la solidaridad y la lucha de toda la clase obrera.