En Vitoria es obvio que la mirada de los fascistas están fijas en el Sindicato de Estudiantes que ha convocado una jornada de lucha el próximo 26 de octubre contra la represión y el recorte de los derechos democráticos y para denunciar la precariedad laboral, la imposibilidad de acceder a una vivienda, los accidentes laborales y los recortes sociales en educación etc. El Sindicato de Estudiantes que celebra su veinte aniversario este año ha demostrado ser la organización juvenil más combativa en todo el Estado siendo la punta de lanza en la lucha por una educación pública y de calidad, contra la guerra imperialista en Irak y Afganistán y contra las mentiras del PP el 11M. Por ello hoy el SE y la Fundación Federico Engels estamos en el punto de mira de las bandas fascistas que se alimentan de la fraseología ultraderechista del Partido Popular y del aparato estatal plagado de jueces, militares, policías y torturadores fascistas que no han sido depurados desde la época de Franco.
El incremento de las agresiones fascistas no sucede al margen de la situación política actual. Después de las elecciones generales del 14 de marzo, la derecha no ha reconocido su derrota. Parece que piensan que perdieron las elecciones gracias a un acuerdo entre la izquierda y Al-Qaeda. Nunca reconocerán que los verdaderos responsables de las movilizaciones contra la guerra imperialista de Iraq, contra el desastre del Prestige o contra la LOU, fueron ellos mismos con su política reaccionaria y su desprecio hacia los jóvenes y los trabajadores.
El gobierno del PSOE no puede mirar hacia otro lado. Tiene en sus manos la posibilidad de desarticular a las bandas fascistas en lugar de defender las leyes reaccionarias que implantó el PP con su apoyo como la antidemocrática Ley de Partidos que ilegaliza y persigue a las organizaciones de izquierda mientras la extrema derecha campa a sus anchas.
El camino que nos queda es la movilización y la lucha. Tenemos que formar comités antifascistas en todos los institutos, barrios y pueblos para animar a organizarse a los demás estudiantes y trabajadores. Los comités antifascistas es la mejor manera de organizar esta campaña en todos los institutos, facultades, barrios, etc. Unidos en la lucha y la movilización podemos aislar socialmente a estos elementos, obligarles a que cesen en su actividad y, además, presionar al gobierno para que desmantele a estas bandas. Somos muchos más que ellos. Ellos están organizados y por eso parecen más fuertes, realmente nosotros tenemos muchísima más fuerza. Pero para eso tenemos que organizarnos.
El fascismo siempre ha sido un instrumento al servicio de los sectores más reaccionarios de la sociedad. Su único objetivo es amedrentar al movimiento obrero y a la juventud, desorganizarnos e impedir que luchemos. Sólo la lucha masiva y organizada de obreros y estudiantes es la única garantía de éxito. Tenemos que defender nuestros derechos democráticos. Unete al Sindicato de Estudiantes y la Fundación Federico Engels, Apóyanos económicamente, participa en la jornada de lucha del día 26.
ORGANIZATE Y LUCHA