Represión y Ley Mordaza: la receta del Gobierno para la juventud
Las infiltraciones policiales vuelven a atacar a los movimientos obreros y antifascistas. El aparato del Estado utiliza a los agentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad para controlar y acosar a activistas, a miembros de distintos colectivos y organizaciones políticas cuyo único “delito” es luchar por unas condiciones dignas para la clase trabajadora y contra las lacras y opresión que nos ofrece el sistema capitalista.
Si luchamos por una sociedad que nos permita vivir en libertad, somos espiados y criminalizados. Está claro: ante sus ataques, ¡nuestra resistencia organizada!
El último caso de infiltración destapado ha sido el de Lucía Rodríguez de Ves, una agente de la Policía Nacional que estuvo desde el 2020 hasta el 2023 en varios grupos activistas de Madrid. En el 2020 entró a participar al colectivo antifascista Distrito104 del barrio de Aluche, y en el 2022 se unió a Movimiento Antirrepresivo de Madrid, dejando ambas asociaciones a finales del 2023.
Este mes de mayo se ha destapado esta infiltración y la de otro agente de la Policía Nacional, Carlos P.M., en otro grupo organizado de la capital, el colectivo Distrito 14 de Moratalaz. Y como estos, hay muchos más ejemplos que ya han salido a la luz. El pasado septiembre se descubrieron ya a otros policías infiltrados en los movimientos sociales de Madrid, y también el caso más escandaloso de todos en Barcelona, donde hasta 8 mujeres sufrieron agresiones sexuales por parte del agente en cuestión.
A pesar de toda la verborrea “progresista”, el Gobierno de Pedro Sánchez utiliza esta arma de juego sucio y abuso de poder contra los jóvenes que nos organizamos. Por si no tuviéramos ya suficiente, el pasado 29 de mayo, el PSOE votó con Vox y el PP en el Congreso seguir con las infiltraciones policiales en los movimientos sociales sin autorización judicial.
Las tendencias autoritarias dentro del aparato del Estado y la represión contra los que luchamos contra la extrema derecha se están agudizando. Y el Gobierno del PSOE-Sumar lo permite en los hechos, manteniendo la tan odiada Ley Mordaza. Un caso significativo lo estamos viendo con los 6 de Zaragoza. Cuatro de los seis jóvenes antifascistas que se movilizaron contra Vox en la ciudad han sido condenados y ya llevan 50 días en la cárcel. ¡Y el Ministerio de Justicia no ha respondido aún a la solicitud de indulto! Como muy bien dice la Plataforma que exige la libertad de los jóvenes: “cada día que pasan en prisión es responsabilidad del Gobierno porque está en su mano el indulto y la libertad”.
No vamos a permitir que se pisoteen nuestros derechos de esta forma. Vamos a seguir organizándonos y construyendo una izquierda de verdad, que combata la represión policial y estatal, y que señale la hipocresía y la complicidad del Gobierno con las cloacas del Estado. ¡Ninguna agresión sin respuesta! ¡La lucha es el único camino!
