El Espacio Rosa Luxemburgo, el local del Sindicato de Estudiantes e Izquierda Revolucionaria del barrio de Carabanchel y centro de numerosas actividades políticas y culturales, ha sido vandalizado por los nazis. Esta mañana ha amanecido pintado con una esvástica y la palabra “fuera”, en lo que forma parte de una ofensiva violenta contra las que estamos en primera línea de la lucha antifascista.
Desde que lo inauguramos en enero de 2024, por el Espacio Rosa Luxemburgo han pasado miles de trabajadores y trabajadoras, jóvenes antifascistas, colectivos memorialistas y movimientos sociales, para impulsar la lucha obrera, antirracista, de la juventud anticapitalista y de las mujeres combativas. En su gran sala se realizó en octubre de 2024 unas jornadas inolvidables sobre la Transición Sangrienta con el testimonio de familiares y amigos de las víctimas de las bandas fascistas y policiales, un mitin en septiembre de este año en apoyo a los trabajadores del metal de Cádiz, además de numerosas conferencias del feminismo combativo y de presentaciones de libros. En apenas dos años han sido decenas de actividades en un Espacio de un barrio obrero conocido por sus tradiciones de lucha, y que ha sido construido con el esfuerzo desinteresado de nuestras compañeras y compañeros.
Este ataque, que se suma a los que han recibido otros locales de la izquierda militante, persigue un objetivo claro: tratar de amedrentarnos y evitar que nos sigamos organizando. Pero no van a conseguir ninguno de sus objetivos.
En un momento en el que la ultraderecha esparce el veneno del racismo, del machismo y la LGTBIfobia, y muestra su odio contra los trabajadores y trabajadoras, no nos van a callar. El Sindicato de Estudiantes e Izquierda Revolucionaria vamos a seguir impulsando la batalla contra el genocidio sionista y la solidaridad con el pueblo palestino, levantando grandes huelgas estudiantiles, defendiendo la bandera del feminismo consecuente y construyendo la resistencia antifascista con una política de clase y revolucionaria, que señale a los fascistas como lo que son: los perros de presa de los capitalistas y los empresarios para salvaguardar su sistema.
No os tenemos miedo, no vamos a dar ni un paso atrás. Llamamos a todas las organizaciones de la izquierda, a los sindicatos de clase y combativos, a los movimientos sociales, a condenar este ataque y a seguir construyendo un frente único para derrotar a la escoria fascista de nuestros barrios, en nuestros centros de estudio y trabajo. No pasarán
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