En los últimos meses de 2006, el ayuntamiento de Seseña (Toledo), con su alcalde Manuel Fuentes a la cabeza, ha sido objeto de atención de los medios de comunicación por plantar cara a un constructor, Francisco Hernando, Paco el Pocero, en sus planes urbanísticos. (Ver artículos y entrevista con el alcalde en www.elmilitante.org).
Seseña, a 36 kilómetros de Madrid por autovía, con una población de 15.000 habitantes (sólo 12.500 censados) vio aprobarse en la pasada legislatura el mayor pelotazo urbanístico de Castilla - La Mancha, con la recalificación, con los votos del PP y el PSOE de los terrenos baldíos a El Pocero que los había comprado a precio rústico.
Se aprueba la construcción de 13.500 viviendas a dos kilómetros del pueblo. El nuevo equipo municipal, dirigido por Manuel Fuentes de Izquierda Unida, le indica al constructor, una vez aprobada la adquisición de las parcelas, que es obligatorio construir las infraestructuras necesarias; agua, luz, accesos, etc.
En el mes de noviembre, ante el incumplimiento del constructor, el equipo de gobierno de IU decide no conceder más licencias (ya hay construidas 5.000 viviendas). A partir de aquí se origina una campaña de El Pocero contra el alcalde y el ayuntamiento, utilizando su propio medio de comunicación La Voz de la Sagra, así como a los concejales del PP y del PSOE, para insultar al alcalde y ponerle varias querellas judiciales, que están impidiendo el normal funcionamiento de la corporación municipal. Todo se resume en la frase de El Pocero: "Todo el mundo en el pueblo trabaja directa o indirectamente para mi".
La connivencia de los grandes constructores con los ayuntamientos es algo habitual en el funcionamiento de las finanzas municipales, casos como los de Marbella, Andratx, Camas, Telde, etc. son sólo la punta del iceberg. La corrupción es generalizada, la Ley del Suelo aprobada por el PP en 1998 permite hacer viviendas caras en todo el Estado.
A diferencia de la mayoría de los ayuntamientos, donde no se ponen trabas a la urbanización salvaje sin control municipal y donde en la práctica son los constructores quienes determinan la política de vivienda, en Seseña, el alcalde ha sido capaz de enfrentarse a amenazas, recusaciones y querellas por el simple hecho de exigir el cumplimiento de las obligaciones de un constructor antes de conceder las licencias.
La impotencia de El Pocero le llevó a utilizar y presionar a sus propios trabajadores, llevándoles a manifestarse ante el ayuntamiento para exigir licencias para el patrón. Este vergonzoso acto pudo llevarse a cabo debido a la inexistencia de sindicatos en las obras. Así, la falta de derechos sindicales y el alto grado de temporalidad, más las amenazas encubiertas, llevó a algunos obreros a semejante acto.
Organización y movilización
El equipo municipal de IU gobierna en minoría (5 concejales, por 4 del PP y 4 del PSOE). Para apoyar la actuación en este tema del alcalde, el 25 de noviembre se realizó una concentración con más de mil personas. Al acto acudieron también militantes de IU de otras poblaciones.
Los medios de comunicación de la burguesía, hasta ahora, se han limitado a presentar al alcalde de Seseña como El llanero solitario, con una mezcla de simpatía patriarcal y cierta condescendencia. Sin embargo, la pugna sigue en pie, antes o después lo que debe quedar claro es quién manda en el pueblo: el ayuntamiento o El Pocero.
A pesar de la valiente actitud del alcalde y del equipo de gobierno de IU respondiendo con la ley en la mano a las presiones del constructor, es evidente que esta batalla sólo se puede ganar si los trabajadores nos organizamos y movilizamos, no sólo en defensa del alcalde, sino en la lucha por las mejoras que el pueblo necesita y que están irremediablemente unidas a la propia construcción de 13.500 viviendas.
Por ahora el alcalde tiene motivos para sentirse respaldado, de hecho ha recibido cientos de e-mail y cartas de solidaridad de agrupaciones de IU, también del PSOE, de UGT y CCOO así como asociaciones de vecinos, trabajadores anónimos, etc.
Sin embargo, la lucha por un control municipal desde posiciones de izquierda en materia de vivienda, tiene que ir mucho más allá que la mera defensa de las instituciones. Es necesaria la organización de los trabajadores y la movilización en defensa de una política de vivienda barata, contra la especulación y los beneficios de los constructores, al tiempo que aumenten las dotaciones públicas de sanidad y educación.
Por ese motivo, un grupo de vecinos convocamos una asamblea para, además de respaldar al alcalde y el ayuntamiento contra El Pocero, organizarnos para exigir al gobierno de Castilla - La Mancha la realización de las necesidades que tiene el pueblo.
En diferentes cartas, el ayuntamiento de Seseña ha enviado a la Junta de Castilla - La Mancha el plan de necesidades actuales y además las que se tendrán con estas 13.500 viviendas (la población pasará de 15.000 habitantes en la actualidad a 40.000 en 2010), sin embargo el gobierno del PSOE en Castilla - La Mancha no ha contestado ninguna en dos años.
Se realizó una primera asamblea el 20 de diciembre a la que acudieron más de 80 vecinos para debatir todo esto, se concretó una plataforma reivindicativa (centro de salud, institutos, tren de cercanías, depuradoras de aguas, Viviendas de Protección Oficial, etc) para ello se formó un Comité de Vecinos al que se apuntaron 40 personas con objeto de convocar en enero una nueva asamblea mucho más numerosa.
También se acordó ponerse en contacto con los sindicatos y partidos de izquierda, así como asociaciones de vecinos, APAs, etc., con objeto de recabar apoyos, para llevar a cabo una manifestación en Toledo ante la sede del gobierno autonómico, con la plataforma reivindicativa que haya sido aprobada en la Asamblea General de Vecinos.
Como el problema no es sólo de Seseña, se acordó también extender este tipo de actuación por otras poblaciones, en primer lugar en la propia provincia de Toledo, de manera que la presión sea lo suficientemente fuerte para obligar a la Junta a invertir recursos públicos en la mejora de las condiciones de vida de los trabajadores al tiempo que se pone freno a las constructoras.
Lo más relevante de esta primera asamblea fue la disposición a participar, organizarse y movilizarse como algo imprescindible para conseguir más inversiones públicas en dotaciones sociales y que las instituciones, como los ayuntamientos, deben estar al servicio de los trabajadores, no de los constructores.
17 de marzo: todos a Toledo
Efectivamente esa disposición que-dó ratificada en una segunda asam-blea celebrada el 25 de enero a la que acudieron 160 personas. En ella se aprobó por unanimidad la celebración de una manifestación en Toledo. La asamblea también votó por unanimidad la plataforma reivindicativa que la manifestación defenderá: la construcción de un hospital de referencia, 2.000 viviendas de protección oficial, la petición de la llegada del tren de cercanías al pueblo y en paralelo el apoyo al alcalde frente a las presiones y querellas de El Pocero. Este último punto llevó a que vergonzosamente el PSOE no apoye a la asamblea vecinal. Corren rumores de que El Pocero está estudiando querellarse también contra la Plataforma Vecinal.
El 1 de febrero se reunió el Comité coordinador de la Plataforma Vecinal y aprobó que la manifestación se celebre el 17 de marzo, preparando una amplia campaña de mesas informativas, pancartas, recogida de firmas, etc... que garantice el éxito de la movilización.
Por el momento tenemos el apoyo de IU de Seseña, así como su compromiso de plantearlo a nivel provincial y regional. También en breve mantendremos una reunión con CCOO y UGT de Toledo para pedirles su apoyo.