Las uniones provinciales de UGT y CCOO Deben ampliar esta lucha a otros sectores y volcarse en el apoyo de la huelga del metal
Los trabajadores han hecho todo lo posible para que la huelga sea un éxito
Las uniones provinciales de UGT y CCOO Deben ampliar esta lucha a otros sectores y volcarse en el apoyo de la huelga del metal
Los trabajadores han hecho todo lo posible para que la huelga sea un éxito
Después de más de un mes de movilizaciones de los trabajadores del metal de Granada demandando un convenio justo, el balance en lo que respecta a la disposición a la lucha de los trabajadores no puede ser más claro: paros totales en los principales polígonos, manifestaciones masivas y continuadas durante semanas, ambiente combativo... Pero ¿Cómo podía ser de otra manera?
Los trabajadores hemos dicho basta ya: ahora es el momento de la lucha
Los trabajadores y nuestras familias nos las vemos y las deseamos para llegar a final de mes: la subida del euríbor, la de la luz (que va a llegar al 11% en total), la gasolina, el pan sube el 11%, los huevos el 13%, la leche el 24%...
Mientras tanto, los beneficios de las empresas están siendo insultantes. La patronal del metal en Granada también llenó la bolsa en el último período de crecimiento económico. Y aunque ahora, interesadamente, hablen de crisis, ahí siguen hinchándose los empresarios y banqueros: la semana pasada el banco Santander anunciaba que iba a ser el tercer banco mundial con más beneficios: 10.000 millones de euros en el 2008.
En cambio, para los trabajadores de la construcción (y de otros sectores) ya han empezado los despidos. Sin embargo, ¿adónde fueron los millones que pagamos por los millones de pisos vendidos en este país a 30, 40 o 50 millones de las antiguas pesetas? Para nosotros quedaron las "trampas" durante 25, 30 0 40 años: en eso va a consistir la vida de una gran parte de la juventud de este país: en pagar su hipoteca hasta la vejez.
A los grandes capitalistas no les importan que tengamos que pagar hipotecas, o que no lleguemos a fin de mes. Ellos defienden su cuota de ganancia, con crisis o sin crisis.
Si los trabajadores no decimos ahora "basta", ¿cuándo será el momento?
Luchamos para ganar
Una vez que los trabajadores hemos dicho que no podemos aguantar más y la patronal provoca la lucha con su intransigencia, no podemos permitirnos el lujo de perder esta lucha. Cuando saltamos a la lucha tenemos que tener claro una idea: "esperamos lo mejor, pero nos preparamos para lo peor". Es decir, la huelga es un gran sacrificio y no es un placer realizarla, pero una vez que decimos que vamos, hay que prepararse por si el enemigo que tenemos delante intenta aguantarnos el pulso.
Se planteó en mitad de la huelga indefinida por parte de las direcciones sindicales crear un "fondo de resistencia" para ayudar a los trabajadores con más problemas. Desde la Corriente Marxista Internacional "El Militante" saludamos esta idea como positiva, pero creemos que se tenía que haber planteado al principio de la lucha, previendo que ésta podía ser dura. Eso hubiera demostrado a la patronal que íbamos a por todas. Además, desde que se anunció no se ha publicitado todo lo que se debería: creemos que se debían de haber instalado huchas y cajas de resistencia en el máximo de lugares públicos, comercios y mercados.
Pensamos también que la manifestación de solidaridad del 1 de julio tenía que haberse convocado antes, como un acicate y un medio para extender el apoyo a la movilización. Creemos que algunos compañeros de la comisión negociadora de UGT deberían de habérselo pensado antes de ir nerviosos a sentarse con los patronos "porque somos gente responsable" tomando la iniciativa de rebajar en algunas reuniones las peticiones aprobadas en asamblea por los trabajadores: ¿Qué mensaje se le transmite así a los empresarios por parte de estos compañeros, de fortaleza o de debilidad? ¿Tenemos que confiar en la "responsabilidad" de la patronal o en la voluntad de lucha de los metalúrgicos granadinos probada con creces?
Extender la lucha para vencer
Estos compañeros tienen que entender que aquí no se trata de ser "responsable", sino que llegados a la situación en que estamos la cuestión es "¿Quiénes somos más fuertes, ellos o nosotros?". Y, por tanto ¿Qué tenemos que hacer para ser más fuertes? ¿Llamar en nuestro socorro al "compañero subdelegado del gobierno" que nos manda reprimir, como desgraciadamente dijo alguno en una asamblea, o pedir apoyo al resto de trabajadores que sufren como nosotros?
Desde la Corriente Marxista Internacional "El Militante" pensamos que es equivocado ver la manifestación del 1 de julio como un último cartucho. Aquí la responsabilidad de las uniones provinciales de UGT y CC.OO. a la hora de extender la lucha es muy grande: la simple amenaza de generalizar este conflicto y llamar a la huelga a otros sectores de trabajadores que, al fin y al cabo, sufren los mismos problemas que los metalúrgicos, desnivelaría muy probablemente la balanza: eso sí que obligaría a la patronal a sentarse a negociar y a hacer concesiones serias.
De hecho, esta lucha, por la publicidad que ha tenido, es un espejo en el que se mira el conjunto de los trabajadores granadinos, sean del sector que sean. También la totalidad de la patronal granadina de todos los sectores observa con lupa el desarrollo de los acontecimientos ¿A alguien se le escapa que una victoria de los trabajadores metalúrgicos aumentaría la confianza del resto de trabajadores en sus propias fuerzas a la hora de demandar sus derechos?
Por tanto, el resto de trabajadores no podemos permanecer impasibles frente a este conflicto como si fuéramos el público de un partido de tenis: debemos exigir a nuestros dirigentes que empiecen a realizar una campaña de asambleas y concienciación en otros sectores como primer paso de cara a movilizaciones más generalizadas que las del 1 de julio.
Directiva de la UE de 65 horas. Frente a agresiones globales, la lucha debe ser organizada y general: HUELGA GENERAL YA de UGT y CCOO
Los capitalistas se preparan para un escenario de crisis económica y van a buscar explotarnos al máximo. Ahí está la directiva de las 65 horas semanales aprobada por la UE. Este es un ataque gravísimo que, por sí solo, justificaría la convocatoria de una Huelga General por parte de UGT y CC.OO. en el estado español, haciendo un llamamiento para extenderla a toda Europa.
De hecho, esta directiva lo que persigue es individualizar las relaciones laborales y acabar con la negociación colectiva, permitiendo por ejemplo pactar al empresario la jornada laboral al margen del convenio: esta salvajada se va a discutir en el Parlamento europeo después del verano.
Viendo este panorama, la CEOE no se anda con titubeos: pide ya al gobierno una nueva reforma laboral que abarate aún más el despido, reducción de los gastos sociales, reducción de los impuestos a los empresarios, recorte de las pensiones...
Los explotadores capitalistas quieren volver al siglo XIX y que sólo tengamos tiempo para trabajar y dormir.
Conclusión
Con este panorama que se abre sólo podemos aspirar a ganar esta lucha. Si perdemos, la patronal granadina se envalentonará y nos querrán hacer tragar hiel, generando desunión, desconfianza y miedo entre los trabajadores: atacarán nuestras conquistas, perseguirán a los luchadores más señalados, querrán darnos una lección para que en años ni se nos ocurra hacer una huelga como ésta.
Si ganamos, realmente podemos aspirar a mejor defender nuestras conquistas sociales ante la crisis que se avecina y a lograr una pausa en la defensa de nuestro poder adquisitivo durante uno o dos años frente al avance incontenible de la inflación. Pero tendremos que volver a luchar ante el avance de la crisis que se nos viene encima.
Es necesario un sindicalismo combativo, de clase y democrático. Las cúpulas estatales de CCOO y UGT dicen que el pacto social es más necesario en tiempos de crisis, como si todos fuésemos en el mismo barco y hubiésemos olvidado la experiencia de los últimos años. Quien defienda hoy el pacto social es porque está completamente alejado de las condiciones de vida y trabajo de la clase obrera o porque está comprometido con los intereses del capital. Pero la mayoría de los afiliados a CCOO y UGT no pensamos lo mismo que estos dirigentes. Por eso es necesario recuperar los sindicatos como instrumentos de lucha contra la patronal.
El capitalismo no sirve. El ansia de beneficios de los capitalistas es tal que, ahora, tras el estallido de la burbuja especulativa sobre la vivienda, se han lanzado a especular con los alimentos, amenazando la vida de cientos de millones de seres humanos.
Se habla mucho de crisis económica, de hambre, de desempleo, pero parece que no hay culpables, que son padecimientos inevitables. No es verdad. Sí hay culpables: los que están al frente de este sistema que sólo ofrece explotación, hambre y miseria: los capitalistas, los grandes monopolios, la Banca, que son los que controlan nuestras vidas.
Por eso, la lucha por la mejora de nuestras condiciones de vida y trabajo está totalmente ligada a la lucha por el socialismo, para que la riqueza que los trabajadores creamos con nuestro esfuerzo deje de estar al servicio de un puñado de parásitos y se ponga al servicio de otra meta: que todos los seres humanos de este planeta podamos tener una vida digna desde el nacimiento hasta la muerte. Únete a la Corriente Marxista Internacional que defiende un sindicalismo combativo, democrático y asambleario para lograr acabar con este sistema caduco.
¡VIVA LA LUCHA DE LOS TRABAJADORES DEL METAL!
¡QUE LA CRISIS LA PAGUEN LOS RICOS!
¡ÚNETE A LA CORRIENTE MARXISTA INTERNACIONAL!