Durante los últimos días la lucha de los vecinos del barrio obrero de Gamonal, ha tenido una enorme repercusión. El inicio de las protestas comenzó por la intención del Ayuntamiento de convertir en un Bulevar la calle Vitoria. Esta obra que costará ocho millones de euros, acabará con el aparcamiento gratuito en superficie del barrio para construir un parking subterráneo cuyas plazas de aparcamiento costarán alrededor de los 20.000 euros. Además se reducirá el número de carriles de la calle ocasionando graves problemas de tráfico. Otro de los elementos que están presentes en las protestas es que el principal beneficiado de estas obras innecesarias y faraónicas es Antonio Miguel Méndez Pozo, un conocido cacique local, que entre otras empresas controla el Diario de Burgos y que en el año 1992 ya fue condenado por delitos urbanísticos.
Mientras el Ayuntamiento aprueba este plan, el barrio de Gamonal —un barrio de trabajadores que aglutina a 70.000 habitantes, algo más de un tercio de la población de toda la ciudad de Burgos— se degrada cada día más como consecuencia de los recortes del PP. En la ciudad de Burgos hay 18.000 parados y, al igual que en el resto del Estado, los recortes en Sanidad o Educación afectan especialmente a las personas con menos recursos económicos. En estas condiciones, la construcción del Bulevar ha sido la gota que ha colmado la paciencia de los vecinos del barrio, y particularmente de los jóvenes, azotados por la lacra del desempleo. Se trata de un auténtico robo a mano armada que pretende saquear los recursos públicos, generados por los trabajadores, para que un puñado de empresarios se hagan más ricos. Mientras tanto, argumentando la falta de dinero, se cierran guarderías y se degradan los servicios públicos más básicos del barrio. Está claro quién sale ganando con este tipo de negocios y por supuesto quién sale perdiendo.
La respuesta del Ayuntamiento fue, en primer lugar, la de hacer oídos sordos ante las protestas que desde finales del año pasado se sucedieron. Este fin de semana la respuesta del PP ha ido un paso más allá, utilizando a la policía para lanzar una represión salvaje contra los vecinos del barrio que se manifestaban contra este tremendo atropello. Los vídeos de la represión hablan por sí mismos de la brutalidad con la que la policía se ha empleado, llegando incluso a entrar en bares o portales para cargar contra los manifestantes. En los últimos días se han detenido cerca de 40 vecinos, 10 de ellos menores, en su inmensa mayoría jóvenes del barrio. Este hecho desmantela la campaña que el PP ha lanzado en sus medios de comunicación afines, acusando de los incidentes a “grupos radicales anti-sistema”, y llegando al delirio cuando insiten en que no son de Burgos sino que "se desplazan porque les atrae generar conflictos y lo hacen cada vez que tienen ocasión de alterar nuestra vida". Es una nueva vuelta de tuerca a la criminalización de cualquier protesta, aunque en ellas participen nuestras madres y nuestras abuelas.
Mientras que los medios de comunicación hablan constantemente de la violencia en las manifestaciones, se olvidan por completo de explicar cual es la realidad a la que este tipo de políticas está condenando a las familias normales y corrientes que viven en barrios como el de Gamonal. El desmantelamiento de los servicios públicos más básicos como la educación o la sanidad, la precariedad laboral, el paro, los desahucios o los recortes en ayudas a la dependencia, la pobreza y la marginación, son los que realmente generan la violencia contra la mayoría de la sociedad y provocan una situación insostenible para millones de personas.
En las últimas horas hemos conocido que dos de los detenidos han ingresado en prisión provisional con una fianza de tres mil euros cada uno por un delito de “desórdenes públicos”. Este hecho es un completo escándalo: mientras los verdaderos criminales y responsables de la situación dramática para miles de familias campan a sus anchas, los que luchan por sus derechos son detenidos y encarcelados. Está claro que la justicia no actúa de la misma forma con los vecinos de Gamonal que con Blesa o la Infanta Cristina.
Desde el Sindicato de Estudiantes apoyamos la lucha de los vecinos de Gamonal que se ha convertido en un punto de referencia para miles de jóvenes y trabajadores en todo el Estado que vemos cómo nuestros barrios, nuestros institutos y nuestras condiciones de vida se degradan para el beneficio de un puñado de parásitos. Apoyamos a los estudiantes que han decidido organizar una huelga indefinida en los institutos del barrio y extenderla al conjunto de la ciudad de Burgos, en solidaridad con los vecinos hasta lograr paralizar estas obras. Exigimos la liberación inmediata y sin cargos de los detenidos y nos ponemos a completa disposición de los jóvenes, de los vecinos y sus organizaciones para extender y apoyar esta lucha que también es la nuestra.
¡No a la construcción del Bulevar!
¡Basta de represión contra los que luchan!
¡Sí se puede!
