A comienzos de este nuevo curso los trabajadores y usuarios de los Polideportivos Eva Duarte, Torrespaña y Breogan nos hemos encontrado con que la empresa que los gestionaba, Palestra, se había declarado en concurso de acreedores, quedando en el aire el futuro de las instalaciones y el futuro de los puestos de trabajo. Los trabajadores no hemos cobrado el mes de Agosto, y en este momento, aunque seguimos contratados y trabajando, ya nos han manifestado que tampoco cobraremos el mes de septiembre. Las familias que habían apuntado a sus hijos en las diversas actividades programadas no saben si se mantendrán, y muchos usuarios preguntan preocupados sobre el futuro de las instalaciones.
El Ayuntamiento de Madrid se ha comprometido a asumir la gestión de las instalaciones, que volverían a ser públicas, pero sin embargo ha manifestado que no se mantendrán los puestos de trabajo, quedándose en la calle 35 trabajadores. Esta situación es completamente inaceptable, ya que los únicos que pagamos por esta penosa situación somos aquellos que ninguna culpa tenemos, y que además hemos garantizado hasta ahora el buen funcionamiento de los tres polideportivos. Muchas familias ya nos han trasladado su solidaridad y han exigido al Ayuntamiento que las cosas sigan como están, y que sus hijos puedan comenzar ya con los cursos programados, que por otra parte están a pleno rendimiento y tienen cada vez mayor demanda.
Que el Ayuntamiento recupere las instalaciones creemos que será positivo, tanto desde el punto de vista del servicio, pudiendo mejorarse con inversión e incluso con más plantilla, como desde el punto de vista de las condiciones laborales de los trabajadores. La empresa que gestionaba las instalaciones, que nos ha ocultado hasta el último momento esta situación, nos ha mantenido en una situación de precariedad laboral permanente, no cobrando cuando nos poníamos enfermos o cuando no podíamos ir a trabajar por cualquier circunstancia justificada, y haciéndonos además buscar un sustituto para cubrir dichas bajas. Nuestros salarios nunca han sobrepasado los 850 euros, y en la mayoría de los casos, al cobrar por hora trabajada, han sido inferiores. Y todo esto a pesar de los cursos intensivos, no regulados por precios públicos, y con los que la empresa obtenían cuantiosos beneficios.
Por eso resulta sorprendente el comportamiento del Ayuntamiento, que recupera unas instalaciones que funcionan gracias a sus trabajadores, pero dejando en la calle a aquellos que han garantizado su buen funcionamiento. Se supone que recuperar servicios públicos privatizados tiene dos ventajas. Por un lado que los trabajadores tengan condiciones laborales y salarios dignos, y no que sean despedidos como se plantea en este caso. Por otro que los servicios puedan mejorar aún más con mayor inversión y más personal, pudiendo incluso ampliarse el rango de cursos y actividades. De esta manera, entre otras cosas con los impuestos de todos, podemos tener polideportivos para todos públicos, asequibles y de calidad.
Pedimos al Ayuntamiento que igual que asume las instalaciones, asuma y mantenga, lo que es aún más importante, todos los puestos de trabajo, con condiciones dignas y estables, para dar continuidad a las actividades y cursos en los tres polideportivos. También creemos que el Ayuntamiento, como responsable subsidiario al ser el que realiza la concesión, debe asumir los salarios impagados de agosto y septiembre. Los trabajadores tenemos que seguir pagando cada mes nuestros alquileres, facturas y comidas, ¡y muchos tenemos niños a los que cuidar! Vemos, como siempre en estos casos, que quienes pagan los errores de gestión son finalmente trabajadores y usuarios, ¡y no estamos dispuestos a permitirlo! Llamamos a todos los vecinos del barrio a apoyar nuestra justa lucha, que es la suya, para que se puedan mantener unas instalaciones que ya funcionan, y para impedir que 35 familias queden arbitrariamente en calle.
POLIDEPORTIVOS PÚBLICOS, ECONÓMICOS Y DE CALIDAD
TRABAJO ESTABLE Y DIGNO
¡NINGÚN DESPIDO!