Desde comienzos de 2025, los y las trabajadoras de Correos, convocadas por CGT, hemos protagonizado varias huelgas y movilizaciones, que fueron un éxito en todo el Estado. Estas movilizaciones se convocaron en el contexto de la lucha contra el Acuerdo Marco, firmado a nuestras espaldas por la dirección de Correos y por los sindicatos CCOO, UGT, CSIF y el Sindicato Libre (SL).
El último Convenio Colectivo firmado data de 2013, ¡hace más de 10 años! Y aún no ha sido renovado. Por otro lado, la plantilla de Correos nos enfrentamos a la empresa que ha hecho lo que ha querido durante estos últimos 12 años precarizando y empeorando nuestras condiciones de trabajo, basándose en las reformas laborales favorables a la patronal, y aún sigue haciéndolo. Mientras todo esto ocurría, la dirección de la empresa regaba de financiación a los sindicatos firmantes del Acuerdo Marco, garantizando una política sindical dócil y conciliadora. Este Acuerdo Marco es, pues, el mayor ataque contra nuestras condiciones salariales y laborales en la historia de Correos.
Algunos de los puntos pactados son:
•Reducción drástica de los gastos de personal. El Acuerdo recoge que dichos gastos pasen del 90% actual al 70% en 2 años (se calcula que con esta medida desaparecerían entre 8.000 y 13.000 puestos de trabajo).
•Profundizar y actualizar, aún más, la movilidad funcional y geográfica. Tanto es así que podrán cambiarnos tanto de funciones como de centro de trabajo si así lo requieren las necesidades del servicio, y siempre a criterio de la empresa.
•Medidas de flexibilidad como la implantación de un calendario estacional donde hasta un 10% de la jornada será variables en función de la carga prevista en cada estación. Dicha variabilidad se fijará en el calendario laboral anual y la jornada laboral no podrá ser inferior a 5 horas, ni superior a 9.
•Además, pretenden implantar un cuarto turno vespertino de martes a sábado, así como otras medidas que atentan de forma clara contra nuestra conciliación familiar y personal. La intención, con el tiempo, es que en Correos se trabaje como en Amazon, todos los días de la semana y con unas condiciones completamente draconianas.
Gracias a estas movilizaciones hemos conseguido que el 15 de marzo se evitara la conversión del Acuerdo en Convenio Colectivo, que era el plazo marcado por sus firmantes para sancionarlo. De no firmarlo en ese plazo, supuestamente el Acuerdo decaería y quedaría sin eficacia, tal y como se marcaba en el propio Acuerdo. Sin embargo, a última hora, y como era previsible, los sindicatos firmantes aceptaron prorrogar el plazo de negociación del mismo hasta el 30 de junio.
La lucha contra el acuerdo marco continúa. ¡Unificar y redoblar la batalla contra la empresa y el sindicalismo amarillo!
En consecuencia, debido a la traición vergonzosa de los dirigentes sindicales de CCOO, UGT, CSIF y SL que se han achantado ante la empresa no hemos conseguido la retirada del Acuerdo Marco, cuestión de capital importancia para luchar por un Convenio justo.
Tras el éxito de las jornadas de huelga de los meses pasados, la última el pasado 28 de mayo, CGT ha convocado 2 jornadas de huelga en todo el Estado los días 27 y 28 de junio. Junto a esto, el llamamiento de CGT a una manifestación estatal en Madrid para el 27 de junio, es un gran paso adelante respecto a las movilizaciones convocadas en febrero y marzo.
En Euskal Herria, LAB y ELA no se han sumado a las huelgas convocadas por CGT, ni tampoco a la marcha a Madrid del 27 de junio. Negarse a secundar la huelga es un error, que debe ser rectificado. Estamos en un momento crítico, a escasos días del ultimátum de la empresa. Este es precisamente el momento de movilizarnos unitariamente, de hacer un llamamiento a redoblar la presión contra la patronal y sus sindicatos afines.
LAB y ELA deben reconsiderar su postura y convocar a las plantillas de Correos en Euskal Herria a participar de la huelga y a extenderla al máximo, así como a participar junto a ESK también en la marcha a Madrid, organizando autobuses para asegurar la máxima asistencia a la misma. En esta huelga nos jugamos mucho. Es de vital importancia que la dirección de Correos y los dirigentes sindicales de los sindicatos firmantes vean nuestra fuerza y nuestro poder de convocatoria cuando actuamos conjuntamente. Las trabas y los debates burocráticos no deben ser un freno para la unidad, ni una excusa para que esta huelga no se convoque de forma militante también en Euskal Herria.
Estamos echando un pulso tanto a la empresa como a los sindicatos firmantes del Acuerdo Marco a nivel estatal, y que también nos afectará a los trabajadores y trabajadoras de Correos en Euskal Herria. Nos une el estar en contra del Acuerdo Marco. Cualquier división entre los sindicatos contrarios al Acuerdo Marco beneficia tanto a la empresa como a los sindicatos firmantes, que desean ver una movilización pequeña para consumar definitivamente su traición. Este apoyo a las convocatorias de CGT no entra en contradicción con que podamos organizar acciones en Euskal Herria complementarias, bien preparadas, contra el Acuerdo Marco.
Solo movilizándonos contundente y unitariamente podremos echar abajo el Acuerdo Marco y, por supuesto, proseguir la lucha por un Convenio justo.
