El jueves, nos concentramos frente a los juzgados de lo social en Jerez, en las horas previas a que se celebrara el juicio. Allí pudimos contar con el apoyo, entre otros, de varios delegados del Comité de Empresa de Ayesa AT, incluidos el presidente y el secretario del mismo y con el delegado LOLS de la sección sindical de CTA-CSC y también de compañeros del Sindicato de Estudiantes y El Militante.
El juicio se celebró con total normalidad. Pudimos entrar en la sala un número considerable de trabajadores, a pesar del limitado número de asientos y de la pequeña dimensión de la misma, permitiéndosenos incluso, dada la importancia del caso, que los trabajadores pudiéramos permanecer en pié. No tiene mucho sentido, por nuestra parte, entrar a valorar el contenido del juicio, algo que correspondería mejor a expertos en derecho. Sí nos gustaría remarcar las últimas palabras del juez al finalizar el juicio donde hizo hincapié en que trataría de ser justo y de valorar el problema en base a la ley pero sin olvidar que no se trata de 66 traslados individuales, sino de la vida de 66 familias y de un drama social en la Bahía.
Nos gustaría recordar que en la primera etapa de nuestra lucha logramos que los traslados se atrasasen y se adelantase la fecha del juicio. En aquella ocasión la valoración que el juez hizo al finalizar la vista, considerando que esto era un drama social, en la misma línea que el comentario del juez del día del juicio, no es más que el producto también de todo el esfuerzo que hemos realizado y de la unidad que hemos demostrado durante toda nuestra lucha.
Llegados a este punto sólo nos queda esperar la sentencia antes de poder decidir cuáles son los siguientes pasos a dar. Tenemos que estar orgullosos de nosotros mismos y de nuestros compañeros (los primeros en estarlo somos los compañeros del Comité de Empresa) porque, a pesar de las maniobras de la empresa, nos hemos mantenido unidos y hemos dado la batalla hasta el final.
En cuanto tengamos la sentencia, la trasladaremos al conjunto de los compañeros y fijaremos la fecha de una asamblea para valorarla entre todos y ver en qué punto nos encontramos, así como haremos un balance de situación de la caja de resistencia y tomaremos colectivamente las decisiones pertinentes respecto a su reparto.
