Durante los últimos dos meses los haitianos han salido masivamente a las calles para protestar por la constante subida de precios de los alimentos básicos. Haití ya era uno de los países más pobres del mundo y ahora la inflación está empeorando esta situación, es tal el nivel de pobreza que el alimento más habitual son las galletas hechas con margarina, sal y arcilla.
Durante los últimos dos meses los haitianos han salido masivamente a las calles para protestar por la constante subida de precios de los alimentos básicos. Haití ya era uno de los países más pobres del mundo y ahora la inflación está empeorando esta situación, es tal el nivel de pobreza que el alimento más habitual son las galletas hechas con margarina, sal y arcilla.
Hace cuatro años un golpe de Estado, apoyado y financiado por el imperialismo norteamericano, derrocó al presidente Aristide que tuvo que huir a Sudáfrica. Desde entonces está allí una "misión de paz" de la ONU, capitaneada por Brasil, que teóricamente iba a garantizar la "democracia" y la mejora de las condiciones de vida de las masas haitianas. En este período de tiempo la ONU y EEUU han gasto en Haití aproximadamente 2.000 millones de dólares, pero que sólo han servido para el enriquecimiento de unos pocos y que la inmensa mayoría de la población viva en la más abyecta pobreza.
Finalmente, la furia y desesperación han estallado y se ha expresado en huelgas generales, manifestaciones y protestas de masas en las calles. Ha habido manifestaciones con miles de personas en las principales ciudades del país: Puerto Príncipe, Gonaives, Les Cayes, Cité Soleil... El 8 de abril una multitud formada por miles de personas intentó entrar por la fuerza en el palacio presidencial al grito de: "¡Estamos hambrientos, alimentadnos!". Los soldados de la ONU se han tenido que refugiar porque se han convertido en uno de los centros de las iras de las masas que exigen la retirada inmediata de sus tropas, teóricamente iban a llevar la "paz" pero en estos dos años han sido muchos los casos de asesinatos, violaciones, etc., en los que han estado implicados los cascos azules. Las masas hambrientas han asaltado los camiones de comida de la ONU y han repartido la comida entre la población, ahora la ONU está distribuyendo comida para evitar que la rebelión se extienda más.
Cuando el actual presidente, René Préval, ganó las elecciones lo hizo prometiendo "reformas sociales" y el regreso del presidente Aristide, pero no ha cumplido ninguna de sus promesas, por eso una de las principales reivindicaciones es el regreso del ex presidente y en las manifestaciones se pueden ver cientos de carteles con su fotografía.
Las condiciones de vida en Haití son espantosas, el 80% de la población vive con menos de 2 dólares al día. La aplicación de la política de ajuste estructural impuesta por el FMI y el Banco Mundial sólo ha servido para agravar la situación. Recientemente, un informe elaborado por Christian Aid explicaba las consecuencias catastróficas de esta política. Haití consume cada año 420.000 toneladas de arroz, de las que tiene que importar 340.000 toneladas. Cada mes consume 31 millones de huevos, 30 millones los importa de la República Dominicana. El 80% de los campesinos vive con menos de 35 dólares al año. En el informe explica que antes de la aplicación de esta política Haití era autosuficiente y satisfacía las necesidades alimentarias de la población, ahora utiliza casi el 80% de los ingresos conseguidos con las exportaciones para pagar las importaciones de alimentos. La situación es tan desesperada que cientos de haitianos no dudan en adentrarse en el océano, con el riesgo de perder la vida, para intentar llegar a EEUU en busca de una vida mejor. Entre 2003 y 2007, 10.000 haitianos intentaron hacer este peligroso viaje en balsa. La subida de los precios de los productos básicos está alimentando la lucha de clases en todo el mundo, Haití es uno de esos ejemplos donde los "hambrientos" han salido a las calles para intentar cambiar radicalmente esta situación.