El incendio en Grenfell Tower en el oeste de Londres se extendió con una velocidad horrorosa y los testigos han descrito escenas desgarradoras de los residentes intentado escapar. Es una tragedia terrible y como es natural ha generado la simpatía y solidaridad de la población con los residentes y familias afectadas.
Sabemos que ha habido bajas y 74 personas tuvieron que ser ingresadas en el hospital, fueron necesarias más de 20 ambulancias para asistir a los heridos. Los detalles se conocerán con el tiempo pero el coraje de los bomberos y vecinos locales se vio rápidamente. Felicitamos el valor de los bomberos, los vecinos y el personal de ambulancia que respondieron de una manera sacrificada y rápida.
Pero junto a la enorme simpatía y la tristeza también ha habido una gran expresión de rabia. Miembros de la rama de trabajadores de la vivienda del sindicato UNITE informaron que por todo Londres residentes se aproximaban a los trabajadores del sector para expresar sus temores por las implicaciones que tenía el incendio. Hay un enfado real porque las preocupaciones de los vecinos no se han escuchado y porque estos terribles acontecimientos se podrían haber evitado.
Hay todo un historial de problemas con el mantenimiento de los bloques y los vecinos ya habían expresado su preocupación por la seguridad en caso de un incendio. El grupo de vecinos Grenfell Action Group dijo que habían advertido reiteradamente a los propietarios del bloque, al ayuntamiento tory de Kensingtony y Chelsea, y a la Organización de Administración de Inquilinos de Kensinton y Chelsea que administra el bloque, por los “muy pobres niveles de seguridad de incendios” en la torre. Pero sus advertencias cayeron en “oídos sordos”.
Aunque Kensington y Chelsea es la parte más rica de Gran Bretaña incluye a muchos residentes de clase trabajadora. En realidad el enojo por la situación inmobiliaria en la ciudad es uno de los factores que explican la sorprendente victoria del candidato laborista, porque durante la campaña electoral convirtió el problema de la vivienda en uno de sus ejes centrales.
A los vecinos se les aconsejó que en caso de incendio se mantuvieran en sus apartamentos porque el aislamiento de incendios daba el tiempo necesario para que llegaran a ellos los servicios de emergencia. Los supervivientes dicen que menos mal que ignoraron este consejo dada la velocidad con que se extendió el fuego.
Dudas sobre la remodelación
Los testigos hablan del revestimiento exterior recientemente instalado y que el fuego levantó, generando dudas sobre la resistencia al fuego de los materiales, estas dudas no son nuevas en la vivienda. Foster Dawn de The Guardian informa de que Rydon, la empresa responsable del revestimiento y la remodelación en Grenfell Tower, ha borrado de su página web todas las referencias a la remodelación.
La Brigada de Bomberos de Londres describió el hecho como una “situación sin precedentes”. Matt Wrack del sindicato de bomberos FBU decía en el Sky que no es normal que el fuego se desarrollara de esta forma y el sindicato pide una investigación sobre el edificio. Algo de lo que se hecho eco la rama de trabajadores de la vivienda de Unite.
Como en los recientes ataques terroristas, este horrendo acontecimiento también pone el foco en la reducción de 550 bomberos en Londres, el cierre de diez estaciones y la reducción de equipamiento. El número de muertes por el fuego subió el año pasado y los datos del tiempo de espera en los departamentos de accidentes, emergencias y ambulancias es demasiado elevado. Los servicios del NHS están colapsados y se enfrentan a más recortes.
Implicaciones nacionales
Las causas de este fuego todavía no se conocen pero preocupan las cuestiones y dudas que surgen porque representan un riesgo inaceptable para todo el país. Los parlamentarios del Grupo Parlamentario de Seguridad de Incendios y Rescate llevan años pidiendo una revisión de las regulaciones de la construcción. Después del incendio devastador en la torre Lakanal House en Southewark en 2009 en el que murieron seis personas se encubrieron los fallos. Entre ellos la falta de equipamiento en caso de riesgo de incendio y que los paneles de las paredes exteriores no tenían la resistencia necesaria al fuego.
El ministro de vivienda Gavin Barwell dijo el pasado mes de octubre en la Cámara de los Comunes que el gobierno revisaría la Parte B de las Regulaciones de Construcción de 2010, relacionada con la seguridad en caso de incendio. Ronnie King, antiguo Jefe de Bomberos y secretario del Comité Parlamentario dijo que “después del incendio en Lakanal House no se ha tenido en cuenta esa investigación ni actualizado la reciente investigación” (Inside Housing. 7/3/17)
La cuestión es que el revestimiento para mejorar el aislamiento disminuía la seguridad de incendios. La revista Inside Housing fue incapaz de conseguir los datos de la revisión que hizo el gobierno en aquel momento. Gavin Barwell, entonces el ministro de vivienda responsable de revisar las regulaciones de construcción perdió su escaño en estas elecciones y ahora ha sido nombrado jefe de gabinete de Theresa May.
Simplemente cambiar las regulaciones de construcción no sería la respuesta adecuada para los edificios ya construidos y que necesitarían ser revisados. El coste económico de todo esto puede ser significativo pero la austeridad no puede ser la excusa para retrasar la respuesta.
Es esencial que las 400-600 personas que se han quedado sin hogar sean realojadas y garantizar un alojamiento seguro y confortable. El gobierno debe actuar rápido y en esta situación no se puede aceptar que hable de la ausencia de dinero.
Necesitamos una investigación exhaustiva sobre lo que sucedió en Grenfell House y las implicaciones para la vivienda en todo el país. Esa investigación debe ser auténticamente independiente del gobierno y debe ser libre para analizar las consecuencias de los recortes del gasto y hacer recomendaciones para no comprometer la seguridad debido a la austeridad. Debe estar encabezada por los sindicatos y grupos de vecinos asesorados por expertos independientes.
Todos los ayuntamientos deberían inspeccionar inmediatamente la seguridad de cada vivienda e invertir urgentemente sin las excusas de los recortes en materiales de seguridad seguros, salidas y espacios adecuados, etc.,
Los ayuntamientos laboristas deben negarse a aprobar más recortes. ¡No a la privatización de la vivienda! ¡Reparaciones y renovaciones inmediatas de las viviendas!
El alcalde de Londres Sadiq Khan debe revertir todos los recortes en el servicio de bomberos de Londres. El militante del Socialist Party del oeste de Londres, Bob Sulatycki, comentaba:
“Ya está bastante claro que no es un trágico accidente sino que es el resultado previsto y criminal de la política de recortes, privatización, la falta de transparencia y la negligencia a nivel local y nacional.
“Todos los inquilinos de viviendas sociales de la zona y más allá deben pensar en la importancia de lo ocurrido.
“Van a continuar los recortes en la provisión del NHS en la zona, incluido el A&Es at Charing Cross y otros hospitales que actualmente están tratando a los heridos pero que se enfrentan a recortes y cierres”.