El compañero explicó de forma muy pedagógica el proceso revolucionario que recorre Venezuela, desmontó las mentiras que la prensa burguesa vierte sobre el proceso, señaló los importantes avances que en materia social se han producido en el país y expuso la necesidad imperiosa de completar la revolución, acabando con el capitalismo, como la única manera de resolver definitivamente los problemas que aún padecen las masas y de evitar el peligro de la contrarrevolución.
En el turno de palabras se produjo un interesante debate sobre el "nivel de conciencia de las masas venezolanas". Uno de los asistentes habló del, en su opinión, bajo nivel de conciencia de las masas en el país, así como de la necesidad de educar en valores al pueblo, como paso previo a la revolución. Estas ideas, constantemente defendidas por los reformistas para no completar la revolución, fueron respondidas por el compañero Alí de forma muy completa.
Si algo ha demostrado la clase obrera venezolana así como otros sectores populares, es precisamente el alto grado de conciencia revolucionaria que poseen, desde el momento que gracias a ellos se logra frenar el golpe de Estado perpetrado por el imperialismo contra Chávez en 2002, hasta las experiencias concretas de control obrero en las empresas. Además, entre el movimiento obrero se está dando ya desde hace años, un gran ímpetu por leer a los clásicos del marxismo, como la única vía para comprender los acontecimientos y ser dueños de su propio destino.
El acto, que gustó mucho a los asistentes, concluyó con una colecta y con la venta de siete ejemplares del periódico obrero El Militante, además de libros de la Fundación Federico Engels.