En la tarde del sábado 28 de enero, más de 5.000 jóvenes en Bilbo y más de 2.500 en Iruñea nos movilizamos, convocados por GKS, contra la ofensiva de los capitalistas y la patronal, y en defensa de un proyecto comunista e internacionalista. Desde Izquierda Revolucionaria hicimos un llamamiento a participar activamente en las manifestaciones.
Los trabajadores y jóvenes que salimos a las calles lo tenemos muy claro: ninguna mejora en nuestras condiciones de vida va a venir de la mano de un pacto con los mismos empresarios que día tras día nos atacan en nuestros puestos de trabajo, que se llenan los bolsillos con la inflación desbocada mientras devalúan nuestros salarios. Desgraciadamente, los dirigentes de la izquierda reformista siguen defendiendo esta agenda, que no ha hecho más que arrastrarles a aplicar las medidas dictadas por los capitalistas.
A continuación, publicamos la hoja que repartimos en la movilización de Bilbo y que fue acogida muy positivamente.
Pincha aquí para descargarte el panfleto en pdf.
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Frente a la crisis capitalista
¡Construir una alternativa comunista e internacionalista!
El capitalismo enfrenta una crisis devastadora que recae sobre los hombros de la clase trabajadora y la juventud, pero que al mismo tiempo proporciona beneficios récord para los grandes empresarios, los monopolios, las industrias armamentísticas y la banca.
Como la experiencia demuestra, no caminamos hacia mayor democracia. Todo lo contrario. La dictadura del capital financiero solo puede ofrecer un futuro de barbarie y miseria, autoritarismo, guerras imperialistas y devastación del medio ambiente. La tarea de la transformación socialista de la sociedad se nos impone no como un horizonte utópico, sino como una necesidad urgente.
En este contexto, las movilizaciones convocadas por GKS en Bilbo e Iruña bajo el lema ‘¡Ante el ataque de empresarios y autoridades, jóvenes trabajadores a luchar!', suponen un paso adelante que apoyamos sin reservas. Unas movilizaciones que tienen por eje no solo denunciar las consecuencias de la crisis, sino la necesidad de organizarnos y reivindicar un programa comunista para transformar radicalmente la sociedad, es parte de una estrategia de acumulación de fuerzas muy necesaria.
Desde Ezker Iraultzailea - Euskal Herria Socialista nos sumamos a estas movilizaciones, ya que queremos contribuir activamente, junto a las y los compañeros de GKS, y numerosos activistas de la izquierda, a levantar ese movimiento revolucionario y comunista, internacionalista y de combate.
El fracaso del reformismo y de la política institucional
Tal y como señalan las y los compañeros de GKS, a la cabeza de esta ofensiva autoritaria del capital se coloca el Estado, sus instituciones y sus fuerzas armadas y los partidos que han decidido gestionar las políticas de la patronal, tanto de la derecha como de la socialdemocracia tradicional, y de la nueva socialdemocracia.
La idea que tan obcecadamente defienden los dirigentes de la izquierda reformista, de UP o de EH Bildu entre otros, de que se puede llegar a un entendimiento con los capitalistas, y mediante los mecanismos parlamentarios conseguir un reparto más justo de la riqueza, ha fracasado por completo. En la práctica, lo que está significando es que los dirigentes de estos partidos han acabado cediendo y aplicando la agenda dictada por el capital financiero y por el imperialismo occidental en su lucha por la hegemonía. Y esta capitulación la enmascaran acusando a la clase obrera de una supuesta falta de conciencia, cuando son ellos precisamente los responsables de garantizar la paz social, y de desarmar ideológicamente a la clase trabajadora.
Aceptar y supeditarse a la lógica capitalista, gestionar las consecuencias devastadoras de la crisis, está asfaltando el camino a la extrema derecha. Una amenaza muy seria que solo se puede combatir con la lucha más contundente de la clase trabajadora y la juventud y defendiendo firmemente un programa revolucionario.
Hay que levantar una alternativa comunista revolucionaria
Las condiciones para construir una alternativa comunista revolucionaria son favorables tanto en Euskal Herria como internacionalmente. Las y los compañeros de GKS se han puesto manos a la obra. Nosotros desde Ezker Iraultzailea - Euskal Herria Socialista también.
La lucha de clases está golpeando duramente en Europa, en América Latina y muchos otros territorios. Los trabajadores irrumpen como la fuerza vertebradora de estas movilizaciones, levantamientos e incluso insurrecciones, como hemos visto en Gran Bretaña, Francia, Chile o Perú, dejando claro quién es el sujeto de la revolución socialista, y contestando en los hechos a todos los que pusieron el RIP sobre la clase obrera. Y esta es también la perspectiva para Euskal Herria y el Estado español.
La principal tarea que nos enfrentamos los comunistas es ganar el oído de estas masas para las ideas de la revolución socialista. Y es en la experiencia de estas luchas donde se pone a prueba la bancarrota de la colaboración de clases del reformismo. Por eso es imprescindible, tal y como explicaba tan insistentemente Lenin, que los comunistas participemos en el seno de estos movimientos y en sus expresiones organizativas, codo con codo con los trabajadores, para confrontar en la acción con las burocracias sindicales y con las ideas y métodos socialdemócratas. Leer hoy el libro de Lenin, El izquierdismo enfermedad infantil del comunismo, es una guía para la acción, para la intervención práctica en la lucha de clases, y para contrarrestar la influencia paralizante de los reformistas.
Acabar con toda opresión social, nacional y de clase en Euskal Herria y en el resto del mundo, este es el objetivo por el que luchamos y que nos une a los comunistas revolucionarios. Por eso mismo, los que nos reivindicamos como tal debemos esforzarnos por trabajar conjuntamente, debatiendo fraternalmente nuestros matices y diferencias, y actuando en unidad de acción para impulsar la lucha en las calles contra los capitalistas y también contra los defensores del orden social capitalista.
