Estamos preocupados y preparándonos, muy alerta con la amenaza de privatización de Esperanza Aguirre'

Los pasados 24 de junio y 1 de julio los trabajadores de Telemadrid realizaron dos jornadas de huelga en defensa del carácter público del ente y en defensa de sus condiciones laborales. La pantalla quedó en negro durante los dos días de huelga. En septiembre, Esperanza Aguirre volvía a la carga anunciando públicamente su intención de privatizar Telemadrid. Sigue adelante con sus planes privatizadores, utilizando el dinero de todos los madrileños para hinchar los bolsillos de los empresarios. De todo esto hablamos con Teresa García, presidenta del comité de empresa y afiliada a CCOO.

‘Estamos preocupados y preparándonos, muy alerta con la amenaza de privatización de Esperanza Aguirre'

Los pasados 24 de junio y 1 de julio los trabajadores de Telemadrid realizaron dos jornadas de huelga en defensa del carácter público del ente y en defensa de sus condiciones laborales. La pantalla quedó en negro durante los dos días de huelga. En septiembre, Esperanza Aguirre volvía a la carga anunciando públicamente su intención de privatizar Telemadrid. Sigue adelante con sus planes privatizadores, utilizando el dinero de todos los madrileños para hinchar los bolsillos de los empresarios. De todo esto hablamos con Teresa García, presidenta del comité de empresa y afiliada a CCOO.

El Militante.- ¿Cómo está la situación tras las dos jornadas de huelga?
Teresa García.-
Después de las dos jornadas de huelga conseguimos alcanzar un acuerdo el 17 de julio con la dirección en uno de los puntos más conflictivos que nosotros queríamos sacar adelante (...) era un compromiso de que la producción se internalizara y que no se siguiera externalizando y dando a productoras amigas. Otro punto era el reconocimiento del poder adquisitivo de los trabajadores de Telemadrid (que ni siquiera eso lo reconocían), la estabilidad en el empleo, y en eso sí hemos firmado un principio de acuerdo, producto de nuestras huelgas que hicimos el día 24 de junio y el 1 de julio.
La situación actual es que estamos preparándonos, porque hasta ahora no se han vuelto a sentar en la mesa del convenio, y porque aunque tengamos un principio de acuerdo, un acta, eso hay que volcarlo en el convenio colectivo. La realidad es que seguimos perdiendo puestos de trabajo día a día, porque siguen sin renovar a los temporales, es cierto que en la programación han internalizado y hacemos ahora más programas de producción interna que antes de los paros. Pero los trabajadores de Telemadrid estamos muy preocupados por la mala gestión que está realizando esta dirección. Siguen gastándose muchísimo dinero en denuncias que nosotros ponemos, que podrían ser evitables por parte de ellos si fueran razonables y fueran buenos gestores, y siguen haciéndose en el gabinete de Cuatrecasas, un gabinete carísimo, que trabaja prácticamente para el PP aquí en Madrid en todas las movidas que prepara Esperanza Aguirre. Estamos preocupados y preparándonos por si acaso tenemos que volver a reiniciar otra vez la lucha por nuestras condiciones de trabajo, por la estabilidad en el empleo, que no lo están cumpliendo. Y sobre todo muy alerta con la amenaza de privatización que ha hecho nuevamente Esperanza Aguirre, creemos que puede ser que hagan algún tipo de treta o truco jurídico para privatizar o externalizar esta empresa por sectores, y en consecuencia perder puestos de trabajo, no sólo de gente temporal, sino también fija.
EM.- Esperanza Aguirre se define como liberal. Sin embargo, lo que estamos viendo es que mucho hablar de privatización y de libre mercado, pero cuando los empresarios se encuentran con una crisis lo que piden es dinero público. ¿Cuál es vuestra opinión al respecto?
TG.-
Creo que la agresión que está haciendo a todos los servicios públicos en general el PP de Madrid, con Esperanza Aguirre a la cabeza, es brutal. Yo creo que los sindicatos tenemos que reaccionar, y los ciudadanos también. Tenemos que mentalizarnos que todo lo que venden es porque va a tener ganancias, si no ningún empresario compraría, está clarísimo. Están dando todo lo público a los sectores privados, como la sanidad, la educación, hablan del Canal de Isabel II, ayer estuvimos con los compañeros en una concentración que hicieron a las 8 de la noche, para apoyarles. Y está claro que es una estrategia de desarticular todo el sector público aquí en Madrid, y dejar a los ciudadanos absolutamente sin nada. Porque lo que ahora nos parece que, bueno, a lo mejor no tiene la mayor importancia, porque todavía vamos a los hospitales y nos atienden, de aquí a unos años el que no tenga dinero no se va a poder pagar el médico, el que no pueda pagarse una matrícula en una universidad o en un buen colegio no va a estudiar, y el que no tenga dinero no va a poder ducharse, no va a tener agua. Es una política totalmente capitalista. Yo creo que esto hay que frenarlo, hay que frenarlo de golpe. Nos ha costado muchísimos años de lucha anteriormente, a muchos trabajadores, a mucha gente joven, que fue torturada, asesinada, encarcelada, para que tuviéramos unos derechos y tuviéramos un sector público que nos amparara a todos. Eso lo estamos perdiendo en poco tiempo, y esa lucha hay que volver a reanudarla, hay que mantener lo que tenemos para dejar a las próximas generaciones lo mismo que hemos podido disfrutar durante unos años. Esta señora yo creo que es como el Robin Hood de la derecha, que roba a los pobres para dárselo a los ricos, y que nadie ponga puertas a eso no lo entendemos.
EM.- ¿Qué creéis que debería hacer el gobierno frente a la crisis? ¿Cómo debería actuar de cara a golpear a la derecha en Madrid, con qué política?
TG.-
(...) El Presidente del gobierno manifiesta siempre que la crisis la va a afrontar pero sin tocar las condiciones sociales de los ciudadanos. Eso lo tiene que demostrar porque hasta la fecha lo que es real es que se está tocando la educación, se está tocando la sanidad... Desde el Partido Socialista se tienen que tomar medidas, se tiene que ser valiente, y como partido de izquierdas que es tiene que defender una política de izquierdas y una política social en defensa de los ciudadanos más desfavorecidos.
EM.- Ahora va a ser el Congreso Confederal de CCOO, ¿qué política debe defender la dirección de CCOO?
TG.-
Efectivamente estamos en proceso congresual. Nosotros somos una sección sindical, tenemos dos representantes a diversos sectores, que vamos a ir a los congresos, primero regionales de Madrid, y luego, no sabemos si llegaremos a los generales. Pero consideramos que la dirección de CCOO tiene que aprender un poco del trabajo que realizamos las secciones sindicales en los puestos de trabajo. Aquí estamos diariamente, las secciones sindicales somos sindicalistas con ética, que creemos en lo que estamos haciendo ideológicamente, que damos muchísimo tiempo y esfuerzo para luchar contra la patronal. Creo que CCOO, que es el sindicato mayoritario en este país, tiene que ser también el sindicato puntero de la defensa y de la lucha por los derechos de los trabajadores y las mejoras sociales de todos los ciudadanos. Somos un sindicato político, es una realidad, y tenemos que posicionarnos así, desde lo que han sido siempre las Comisiones Obreras, desde su creación, defendiendo lo público, al más desfavorecido, defendiendo los derechos de los trabajadores. Y creo que tenemos que incrementar nuestra lucha ahí donde las empresas y las patronales son más agresivas. (...) Tenemos que luchar por mejorar lo que tenemos, porque hasta ahora en las secciones sindicales se está dando la situación de que estamos luchando por mantener lo que tenemos, no avanzamos. Yo tengo mucha confianza en este sindicato, por eso pertenezco a él. Creo que está lleno de grandes sindicalistas, muy luchadores, que dan gran parte de su vida en dedicarse a esto. Y creo que la estructura tiene que fijarse un poquito en lo que hacemos en el día a día las secciones sindicales.

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