Nissan ha anunciado el despido del 40% de la plantilla, 1.680 trabajadores. A pesar de que la empresa en el último lustro ha obtenido importantes beneficios y ha incrementado su productividad de manera destacada, el director general de Nissan Motor Ibérica, Fumiaki Matsumoto, ha declarado la guerra a los trabajadores con el anuncio de sus planes. Nissan ha amasado importantes beneficios con el trabajo, con el sudor y los nervios de los que ahora quiere enviar al paro sin ningún reparo. El recorte de producción va a afectar también a las empresas auxiliares y esto puede representar que otras 4.000 familias se vean abocadas a un futuro incierto. Y más teniendo en cuenta el escenario de recesión económica y de aumento del paro en la que nos encontramos.

Nissan ha anunciado el despido del 40% de la plantilla, 1.680 trabajadores. A pesar de que la empresa en el último lustro ha obtenido importantes beneficios y ha incrementado su productividad de manera destacada, el director general de Nissan Motor Ibérica, Fumiaki Matsumoto, ha declarado la guerra a los trabajadores con el anuncio de sus planes. Nissan ha amasado importantes beneficios con el trabajo, con el sudor y los nervios de los que ahora quiere enviar al paro sin ningún reparo. El recorte de producción va a afectar también a las empresas auxiliares y esto puede representar que otras 4.000 familias se vean abocadas a un futuro incierto. Y más teniendo en cuenta el escenario de recesión económica y de aumento del paro en la que nos encontramos.

Al mismo tiempo, la dirección de SEAT aumenta el número de afectados por el ERE temporal, aumentando el número de despedidos de enero a julio de 500 a 750 (lo que se suma a los 750 despedidos hasta diciembre y los paros de 20 días que afectarán a unos 4.000 trabajadores).  También en la planta de Ford en Almussafes los trabajadores se encuentran desde el pasado 29 de septiembre con un ERE que afecta a 990 trabajadores, que hasta el día 24 de diciembre estarán despedidos, cobrando sólo entre el 65% y el 80% de su salario. Estos expedientes, aunque "temporales", son una amenaza grave inmediata sobre los trabajadores. La continuidad de miles de puestos de trabajo está en peligro. Como los mismos directivos de las multinacionales han planteado repetidamente, estas medidas son temporales mientras "no se agrave la crisis de la automoción".

Por una Huelga de 24 horas del sector del automóvil

Por una Huelga General en defensa del empleo

Detrás de esta ofensiva brutal por parte de la patronal, detrás de los planes de destrucción de empleo que quieren llevar a cabo no sólo está la caída de las ventas. Está también la lucha feroz por los mercados, la competencia brutal que hay entre las compañías. En el fondo, de lo que se trata es de una crisis de sobreproducción. Esta se da en la medida que la capacidad de consumo de la mayoría de la población en el mundo, de los trabajadores en definitiva, no crece al mismo ritmo que la capacidad productiva instalada. Pero reconocer las contradicciones del capitalismo en absoluto quiere decir que debamos aceptar los planes de las empresas. Hay que defender todos y cada uno de los puestos de trabajo. Es necesario y urgente que las direcciones de UGT y CCOO convoquen un plan de movilizaciones que, empezando por la convocatoria de una Huelga de 24 horas del sector del automóvil, tanto en empresas matriz como auxiliares y contratas, desemboque en la convocatoria de una Huelga General de 24 horas en defensa del empleo y en contra de los despidos y los EREs.

Las direcciones de UGT y CCOO en Catalunya deberían convocar ya una Huelga General de 24 horas en Catalunya para presionar al gobierno de la Generalitat, de cuya autorización depende que se aprueben o se rechacen los expedientes presentados por las multinacionales en Catalunya. A las multinacionales del sector del automóvil no se les va a parar los pies si no es con una movilización masiva y contundente de toda la clase obrera de Catalunya. Son muchas las empresas, de diferentes sectores, que se encuentran ante el chantaje y los ataques de la patronal, con EREs y despidos encima de la mesa. Hay que acabar cuanto antes con esta sangría. La crisis no es responsabilidad de los trabajadores. Que paguen la crisis sus responsables, los capitalistas, y no los trabajadores.

Las declaraciones de estos días de Méndez y Fidalgo, los dirigentes de UGT y CCOO a nivel estatal, intentando transmitir un mensaje de tranquilidad no son de recibo. No se puede seguir con el discurso de "diálogo social", de "responsabilidad" ante la crisis, ofreciéndose para pactos en los que se ofrece moderación salarial a cambio de "mantener el empleo". ¿Eso es lo que va a impedir que se destruyan miles de puestos de trabajo? Que nos digan en qué empresa, en qué sector, se ha impedido despidos y recortes de plantilla gracias a esa actitud "responsable". La moderación salarial, en realidad, la pérdida de poder adquisitivo de nuestros sueldos, es un hecho generalizado y no está evitando la avalancha de EREs y despidos ante la que nos encontramos. Declaraciones como las que han hecho recientemente Fidalgo y Méndez,  recordando a los empresarios la cláusula que les permite descolgarse de los convenios sectoriales por la situación económica, son completamente inaceptables. Por esta vía no se defienden los derechos de los trabajadores, sino los de los empresarios.

La única alternativa: nacionalización sin indemnización bajo control obrero

La única forma de defender todos los empleos, presionando a través de la lucha masiva, es defendiendo la nacionalización sin indemnización bajo control de los trabajadores de las empresas amenazadas de cierre o despidos. La única alternativa frente a la ofensiva patronal es que el gobierno haga públicas las empresas en crisis para mantener el empleo. Durante las últimas semanas hemos visto como los gobiernos norteamericano y europeos (incluido el Gobierno de Zapatero) han regalado cantidades obscenas de dinero público para mantener los beneficios de la gran banca, en una especie de socialismo para los ricos y capitalismo (despidos y precariedad) para los obreros.

No podemos permitir que las mismas multinacionales y bancos que han estado exprimiendo hasta a la extenuación a la clase obrera, obteniendo beneficios millonarios y cuantiosas subvenciones públicas durante años, ahora se lleven la riqueza y nos condenen al paro. Lo que deberían hacer el gobierno del PSOE y el tripatit, y debemos reclamar a través de la lucha, es la nacionalización bajo control obrero de las empresas en crisis, y la expropiación sin indemnización de la banca y los monopolios.

Por un sindicalismo combativo, democrático y de clase

Desde la corriente marxista El Militante hacemos un llamamiento a los trabajadores, a los delegados y afiliados de UGT y CCOO, a luchar por un sindicalismo combativo, de clase y democrático, en el que los trabajadores decidimos a través de las asambleas. Al mismo tiempo,  hay que forzar a las direcciones sindicales a  que convoquen ya, de forma inmediata, una Huelga General de 24 horas en todo el estado, en defensa del empleo, en defensa de los salarios. En defensa de nuestros derechos e intereses como clase, en definitiva.