¡En defensa de una radiotelevisión pública y de calidad!
A principio del pasado mes de octubre, el gobierno de Álvarez-Cascos anunciaba por medio de su consejero de Hacienda y Sector Público, Ramón del Riego, la cancelación de 11,3 millones de euros de transferencias directas del Principado a la Radio Televisión del Principado de Asturias (RTPA), previstas para lo que resta del año. El viernes 28 de octubre las tres sociedades integrantes —TPA, RPA y la Productora de Programas— presentaron un preconcurso de acreedores ante los juzgados de lo Mercantil de Oviedo y Gijón. De esta manera la RTPA es el primer ente público a nivel estatal que se declara insolvente, dejando en una situación crítica a sus cerca de 700 trabajadores.
Tras las medidas de recorte presupuestario el cese de una parte importante de las emisiones sigue su curso, tanto en los dos canales de televisión como en la radio. Los impagos del gobierno regional superaban los 8 millones de euros a principios de noviembre y esto se traduce en impagos a proveedores. La RTPA tiene una plantilla de unos 90 trabajadores, a los que hay que sumar otros 600 que trabajan para las 58 empresas que conforman el conglomerado de contratas. En muchas de ellas los trabajadores ya no cobran desde hace meses. Se está abocando al sector audiovisual asturiano a una crisis sin precedentes, algunos cálculos alertan de que los recortes superarían los mil puestos de trabajo entre empleos directos e indirectos.
Para justificar este ataque brutal a la radiotelevisión pública el señor del Riego ha utilizado el peregrino argumento de que “se recorta en la RTPA para no cerrar hospitales”, pero el programa del partido de Cascos, Foro Asturias (FAC), es una declaración de guerra contra el sector público en general: educación, sanidad, servicios, telecomunicaciones, etc.
La decisión de Cascos sobre la radio televisión asturiana no es ninguna sorpresa, antes de las últimas elecciones autonómicas, el 8 de mayo, ya decía a laprensa: “la RTPA será enajenada o bien tendrá su gestión transferida al sector privado mediante una concesión”. Efectivamente, al objetivo del recorte social se suma el de poseer el control de los medios de comunicación, una cuestión fundamental para cualquier gobierno. Los representantes de FAC están presionando para estar representados en el consejo de administración del ente asturiano.
Subcontratación masiva
Los trabajadores del sector audiovisual soportan desde hace años niveles de precariedad y temporalidad espeluznantes. En el caso de la RTPA, como en muchas televisiones públicas autonómicas del resto del Estado español, se practica la subcontratación masiva, subvencionando con dinero público la “actividad empresarial” de los “emprendedores”, en este caso las empresas productoras, que ahora están asfixiadas por los impagos. De esta manera, los responsables políticos y de la administración pública (durante el gobierno del PSOE) se lavaban las manos con la situación de estos trabajadores, a quienes mantenían en esta situación durante años, realizando las mismas labores, en las mismas instalaciones y con el mismo instrumental que sus compañeros de la plantilla matriz. También era una forma de dividir a los trabajadores a la hora de poder hacer más fuerza y pelear por unas condiciones dignas. En los últimos años hubo algunos casos de persecución sindical a los que defendían los derechos de los trabajadores, se quería amedrentar a la plantilla. Pronto la consigna de la incorporación de estos trabajadores precarios a la plantilla matriz se convirtió en una bandera de batalla, por lo menos defendida desde el sector más combativo de los trabajadores.
Desde el principio, el comité de empresa compuesto por CCOO, CSI, USO y UGT realizó asambleas con todos los afectados donde se aprobó iniciar un calendario de movilizaciones para reivindicar una RTPA pública y defender los puestos de trabajo. Hubo concentraciones y manifestaciones, la última el pasado 27 de octubre con cientos de asistentes en Oviedo. Dos días después se realizaron conciertos donde participaron 24 grupos del panorama musical asturiano en solidaridad con esta lucha. En poco tiempo se recogieron miles de firmas de apoyo de los asturianos a favor de una RTPA pública.
Desde estas líneas queremos dar todo nuestro apoyo a esta lucha y nos oponemos a su privatización o cierre. Defendemos unos medios de comunicación públicos y de calidad al servicio del pueblo y no de unos pocos que quieren hacer negocios con la desinformación y arrebatarnos la cultura. Es necesario que los dirigentes sindicales, fundamentalmente de CCOO y UGT, liguen el conflicto en la RTPA con el resto de ataques al sector público, preparando una respuesta más contundente a los ataques que se nos vienen encima.