El pasado 10 de abril, sólo once días después de haber presentado los nuevos presupuestos del Estado donde se contemplaba un recorte del 13,7% en sanidad, el gobierno anunció un nuevo recorte de 7.000 millones de euros. De esta manera ejecutaba el mandato que la gran burguesía nacional e internacional le transmitía.
El 19 de abril se confirmó un incremento del copago en los medicamentos. Los pensionistas que cobren menos de 100.000 euros al año pagarán un 10% del precio (antes 0%) hasta un máximo de entre 8 y 18 euros al mes según la renta (teniendo en cuenta los fármacos que consumen, será asumido en casi todos los casos). En una situación en que más de cuatro millones de pensionistas cobran menos del Salario Mínimo Interprofesional, de la subida del IRPF, agua, luz, transportes, etc., este ataque cobra aún mayor gravedad. Sin mencionar el hecho de que ante las ya más de 1,5 millones de familias con todos los miembros en paro, son muchos los jubilados que están manteniendo a sus hijos. Los trabajadores por debajo del mismo umbral de ingresos pasarán a pagar un 50% del precio (antes, el 40%).
Las mentiras del PP
El gobierno ha intentado echar una cortina de humo defendiendo la justicia de la contrarreforma ya que se vinculará el copago a la renta. Los jubilados con ingresos superiores a 100.000 euros pagarán un máximo de 60 euros al mes, y los “trabajadores” con dichos ingresos un 60% del precio. Pero es de dominio público que gente con este nivel de renta no va a la sanidad pública, con lo que no se verán en nada afectados. A ello hemos de sumar que para decidir el porcentaje de copago solamente se tendrán en cuenta los ingresos, no el patrimonio (viviendas, coches, yates, etc).
Otra gran mentira de la campaña mediática desplegada es la afirmación de que en el Estado español somos unos privilegiados porque es uno de los países donde menos se paga por la sanidad. Un reciente informe de la Comisión Europea desvelaba que la media de copago en la UE es del 14,4% mientras aquí la cifra llega al 20,7%. Esto se explica porque en el Estado español, a diferencia de en otros países de la UE, el Estado no cubre nada de podología, odontología, gafas, etc.
Otro ataque salvaje ha recaído sobre los trabajadores inmigrantes. A partir de ahora aún estando empadronado no tendrán derecho a asistencia médica si están desempleados. Únicamente podrán acceder a urgencias, maternidad y pediatría. Se calcula que se verán afectadas 500.000 personas. Durante el período de boom los empresarios se enriquecieron a su costa pagándoles salarios miserables y ahora quieren dejarlos morir si caen enfermos.
Lo peor de todo es que pese a la gravedad de los ataques explicados esto no es más que el inicio. Los cálculos más generosos hablan de que el incremento del copago supondrá un ahorro de 1.275 millones de los 7.000 que pretende el gobierno. Para llegar a dicha cifra ya se han lanzado globos sonda que contemplan un recorte en la cartera de servicios (como, por ejemplo, el aborto); CiU ha pedido que se amplíe a todo el Estado el euro por receta y que se cobren 10 euros por día de hospitalización; el PP de Valencia ha planteado cobrar a los turistas nacionales; y además de futuras rebajas salariales en el sector sanitario miembros del PP han planteado la posibilidad de vincular el 25% del salario del personal sanitario a la “productividad”.
Recortes que llueven
sobre mojado
Desde que empezó la crisis la sanidad pública ha sido continuamente atacada. El gasto sanitario estatal por habitante de 2011 fue inferior al de 2007 (un verdadero hachazo teniendo en cuenta la subida del IPC), y sufrió un recorte del 11% respecto 2010. Sin existir cifras estatales centralizadas podemos afirmar que está habiendo una verdadera sangría de empleo: más de 7.000 despidos en Catalunya, 3.000 en Castilla - La Mancha, 2.000 en Madrid, etc. La reposición de jubilaciones en 2011 fue del 10% y el plan para 2012 es que baje al 0%.
A la vanguardia de los ataques está el gobierno de CiU en Catalunya. El presupuesto de 2011 fue recortado un 11% y el de 2012 un 4,8% más. En 2011 el número de personas en lista de espera pasó de 56.670 a 80.540 y el tiempo de espera se incrementó en dos semanas; se han hecho 21.500 operaciones menos y cerrado los quirófanos por la tarde a la vez que se alquilan a clínicas privadas; ha cerrado el 50% de los Centros de Atención Primaria (CAPs) con urgencias nocturnas; y se ha paralizado la construcción de 7 hospitales y 44 CAPs. Además, el pasado otoño la Generalitat puso en marcha un plan que prevé privatizar el 100% de la sanidad pública catalana1.
Pero los ataques están siendo generalizados, reducción de presupuestos y salarios es la tónica general en todo el Estado. Valencia ha planteado cerrar todos los centros por la tarde exceptuando urgencias; Madrid ha amenazado con reservarse la posibilidad de instaurar jornadas laborales de 9-12 horas; Castilla - La Mancha ha anunciado recientemente la privatización de cuatro hospitales y la supresión de pruebas de talón2; Canarias, un nuevo recorte del 11% del presupuesto y una reducción de 50 millones en salarios, etc.
El camino es la lucha masiva y continuada en la calle
La intención de la burguesía es clara, acabar con una conquista histórica del movimiento obrero como es la sanidad pública. Y, a la vez, amasar grandes beneficios a costa de la salud de los trabajadores, ya que cuentan con que muchas familias obreras sacrificarán lo que haga falta para que sus seres queridos tengan una atención de calidad.
Desde el inicio de la crisis, los trabajadores y la juventud hemos demostrado una y otra vez en la calle que estamos dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias para defender nuestros derechos (huelgas generales del 29-S y 29-M, movilizaciones del 15-M, movilizaciones estudiantiles, etc). Pero para conseguirlo necesitamos que las direcciones sindicales de CCOO y UGT abandonen su política de consensos y lancen un calendario serio, contundente y continuado de movilizaciones hasta tirar atrás todos los ataques. La lucha en defensa de la sanidad pública es la lucha contra la crisis capitalista y los ataques de la derecha. ¡Hace falta ya una huelga general de 48h!
1. Explicado en “CiU se lanza al desmantelamiento total de la sanidad pública”, www.elmilitante.net/index.php?option=com_content&view=article&id=7481:ciu-se-lanza-al-desmantelamiento-total-de-la-sanidad-publica-&catid=1061&Itemid=100005
2. Pruebas que se hacen a recién nacidos para detectar enfermedades congénitas para las cuales hay tratamiento eficaz pero que si no se detectan muy pronto la evolución de la enfermedad es fatal.