El brutal retroceso en Madrid, en Valencia, en Catalunya o en Euskadi, por citar algunos ejemplos, y la perdida de casi la mitad de los apoyos que recibimos en las anteriores europeas, es un duro golpe a las políticas de la dirección, a su falta de oposición de izquierdas al PP, a su subordinación a los grandes poderes económicos. El avance de Izquierda Unida, que triplica sus votos, y la irrupción de Podemos, es también la otra cara de esta situación: la población, los trabajadores, la juventud, los parados, las capas medias empobrecidas, buscan una salida al callejón de la crisis, y la buscan por la izquierda.

Los resultados electorales han desatado una gran conmoción en la clase dominante que, en vista de lo que puede suceder en las próximas elecciones generales, ha acelerado la abdicación de la Corona por Juan Carlos I. El Rey, que es el representante máximo de los intereses de los capitalistas, se ha visto forzado a ceder la Corona en su hijo Felipe, ante la oleada de protestas y el desprestigio sufrido por la Familia Real, cuyas causas hay que buscarlas en la terrible situación social que sufren la mayoría empobrecida y maltratada por el Gobierno del PP.

Hay que girar a la izquierda

Esta derrota del aparato del partido es el reflejo de su falta de alternativas al capitalismo y a su crisis. Pero no es un hecho aislado en el estado español. En Francia, el PSF de Hollande queda relegado a la tercera posición, con el 14% de los votos, y es superado por la derecha tradicional y el ultraderechista Frente Nacional. En Grecia, el PASOK se hunde y apenas logra el 8% cuando hace cuatro años obtenía el 39%. Estos resultados catastróficos son la consecuencia de aplicar desde el gobierno políticas que en nada se diferencian de la derecha, como en el caso francés, o directamente de montar con la derecha gobiernos de coalición, como en Grecia, para llevar a cabo los planes de austeridad dictados por la banca, la UE y el FMI, en contra de la mayoría de la población.

¿Vamos a consentir que el PSOE se hunda más o siga el camino de la autodestrucción? Somos muchos los militantes de base que estamos en completo desacuerdo con la política de la dirección, con su oposición parlamentaria de terciopelo al PP, con su falta de decisión para enfrentarse a los grandes poderes económicos cuando no de plena subordinación a sus intereses. Somos muchos los que en la base del PSOE exigimos un cambio radical a la izquierda en nuestro partido. Y, ese cambio, no pasa por pactar con el PP, como vergonzosamente reclama Felipe González, sino por estar al lado de los movimientos sociales, de las Mareas, de los trabajadores, de la juventud, codo con codo en sus luchas, defendiendo las ideas del socialismo.

Izquierda Socialista de Málaga exige este cambio a la izquierda que sólo puede venir del impulso de la militancia de base, y de un giro de 180 grados en la política del partido. Una vuelta a las señas de identidad del socialismo genuino, que pasa por defender un programa mínimo que responda a las acuciantes necesidades de la mayoría:

1. Convocatoria de un Referéndum para que se elija democráticamente qué tipo de Estado queremos, siendo la pregunta pertinente ¿República o Monarquía?

1. Por un Estado Republicano Socialista y Federal, Laico, Democrático, ejerciendo el legítimo derecho de autodeterminación.

1. No más recortes y defensa firme de los Derechos Sociales y Democráticos. Sanidad y educación públicas, gratuitas, universales y de calidad. Prohibición de los desahucios por ley, y expropiación de todas las viviendas robadas por la banca para establecer un gran parque de vivienda pública en alquiler social.

1. Para luchar contra el desempleo masivo, para elevar los salarios, para mejorar las condiciones de vida de la mayoría: nacionalización de la banca, las eléctricas y los sectores estratégicos, bajo el control democrático de los trabajadores y sus organizaciones. Así sería posible un plan de choque para poner en marcha la economía productiva en beneficio de todos, acabando con la corrupción y la especulación.

1. Por un Frente de Izquierdas y un gobierno de los trabajadores que contemple alianzas con Izquierda Unida, Podemos y los sindicatos de clase, invitando a las demás fuerzas sociales que quieran colaborar en la defensa de una alternativa genuinamente socialista y del pueblo.

1. Hacia la Huelga general con los sindicatos UGT y CCOO que deben dar un paso al frente, exigiendo junto a las fuerzas políticas de la izquierda elecciones generales anticipadas.

Desde Izquierda Socialista hacemos un llamamiento para dotar al PSOE de un programa que conecte con las aspiraciones de nuestra base social. Queremos un cambio profundo, no sólo de nombres, sino de políticas. Por eso, ante la campaña de elección de candidatos para la Secretaría General del Partido en el próximo Congreso, nuestra corriente acordó en la última Coordinadora Federal Ampliada celebrada en Madrid, proponer a JOSÉ ANTONIO PÉREZ TAPIAS, como candidato por nuestra corriente de opinión.

Somos conscientes de que el PSOE necesita una regeneración de abajo arriba, una transformación global, y sabemos que eso sólo se logrará con la participación activa de la clase trabajadora, de la juventud, de los que sufrimos las lacras de la crisis, y no de los que cómodamente viven instalados en el sistema.

Coordinadora Provincial de Málaga.

Izquierda Socialista PSOE de Andalucía

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