Dentro de este enorme trabajo hay que destacar el papel que estamos jugando en la eliminación de las cláusulas suelo, mediante las cuales las entidades bancarias cobran intereses abusivos a los hipotecados. La firmeza en defensa de los afectados por la hipoteca y la presión que mantenemos sobre los bancos están dando sus primeros frutos. Son ya más de 50 familias las que se han visto beneficiadas y a las que La Caixa ha tenido que anular la cláusula suelo. Pero la lucha continúa en contacto con las asambleas de afectados por la hipoteca y no pararemos hasta que todos los casos que llevamos (casi 200 reclamaciones), queden libres de éste y otros abusos.
Paralelamente estamos reclamando también por vía judicial el dinero que los bancos han cobrado indebidamente a los hipotecados valiéndose de estas prácticas ilegales. Por supuesto que se puede. Podemos enfrentarnos al poder de los bancos y al saqueo permanente al que someten a millones de familias y para eso hemos implantado este servicio municipal.
¡La crisis que la paguen los capitalistas!
Nuestra relación fraternal con los bancos no se limita a las cláusulas. El ayuntamiento de Villaverde del Río tiene aprobado un impuesto especial para las oficinas bancarias en la localidad por los cajeros automáticos que dan a la calle, en concepto de ocupación de vía pública. La tasa es la más alta en todo el Estado español, 10.000 euros por cajero. Cuando el gobierno de IU propuso en el Pleno municipal la aplicación de este impuesto y su cuantía, los amigos de los bancos, los concejales del PP y PSOE protestaron por su elevada cuantía, una “fanfarronada” del alcalde que nada puede hacer frente al poder de los bancos. Pues bien, ya nos han ingresado el dinero, unos fondos destinados a mantener el gasto social. Estos son los únicos impuestos que suben en Villaverde. Claro que se puede. La cuestión es tener claro qué intereses se defienden, los del obrero o los del banquero.