El 23 de septiembre el Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares declaraba nulo el Decreto de trilingüismo (TIL), que buscaba marginar la enseñanza del catalán. Días después la consellera de Educación dimitía de su cargo. Evidentemente esta victoria no es producto simplemente de una buena estrategia jurídica en los tribunales, sino principalmente de las movilizaciones masivas y contundentes en las calles de todos los pueblos y ciudades de las Islas contra el TIL, y contra los recortes y ataques del PP a la enseñanza pública, con manifestaciones no vistas en décadas y con una huelga indefinida que duró tres semanas y en la que se recaudó en la caja de resistencia para que los profesores pudieran continuar la lucha, más de 300.000 euros de solidaridad entre miles de jóvenes y trabajadores de las islas y otras partes del estado.
Esta impresionante marea verde fue respondida por el PP como siempre hacen, con desprecio y con una brutal campaña de represión, sancionando a directores y profesores, prohibiendo y multando por poner pancartas o senyeras en colegios o institutos, tratando de frenar la movilización mediante el miedo. Pero no lo consiguieron, y de nuevo este curso se comenzó el 15 de septiembre con una huelga educativa. Ahora esta sentencia pone el RIP al Decreto y al Gobierno de Bauzá.
¡Sí se puede!