La llegada de Ahora Madrid al gobierno del ayuntamiento ha generado una gran ilusión entre la clase trabajadora y la juventud madrileña. Sin embargo, algunas decisiones tomadas por el nuevo equipo de gobierno han sido un verdadero jarro de agua fría para miles de activistas de la izquierda que hicimos posible esta victoria histórica. Las constantes concesiones a la derecha y a la presión mediática que esta genera para desestabilizar la alcaldía de Manuela Carmena, son una mala señal. Pero la semana pasada se produjo un salto de calidad, cuando los concejales de Ahora Madrid, con la valiente excepción de Mauricio Valiente y Yolanda Rodríguez, votaron favorablemente una moción presentada por el PP en defensa de dos golpistas venezolanos encarcelados. Este voto favorable de Manuela Carmena y los concejales de Podemos a una moción presentada por Esperanza Aguirre, que es parte de la campaña internacional contra la revolución venezolana, es una completa vergüenza.
Los golpistas venezolanos detenidos, Leopoldo López y Antonio Ledesma, están muy lejos de ser dos demócratas. En realidad, se trata de dos reconocidos ultraderechistas de la peor calaña, ligados antes de la Revolución Bolivariana al ala más dura y represiva del aparato estatal y al imperialismo americano, que tuvieron una importante participación en el golpe de Estado del año 2002 y en los sucesivos intentos de acabar con la Revolución y con los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolas Maduro. Estos individuos no han cesado ni un solo día en su actividad para destruir un régimen que ha sido apoyado una y otra vez por el pueblo de Venezuela, y de forma masiva, en cada proceso electoral.
Posicionarse con estos personajes alegando la “defensa de los derechos humanos”, no hace más que colocar a Ahora Madrid, y a los concejales que han votado esta moción, junto a la derecha más recalcitrante, con Aznar y su sequito de reaccionarios, o con los líderes socialdemócratas que, como Felipe González, miran a otro lado cuando se le señalan los crímenes de Carlos Andrés Pérez, responsable de la masacre de miles de inocentes durante el Caracazo, pero siempre dispuestos a participar en ruidosas campañas contra un pueblo que lucha por librase de la explotación. Estos personajes no pueden, no deben, ser los compañeros de viaje de Ahora Madrid. Nuestros concejales deben denunciar estas maniobras como lo que son, luz de gas para que la campaña contra la revolución venezolana continué, para que los enemigos del pueblo venezolano, y de todos los pueblos, puedan seguir perpetuando su sistema.
Es completamente falsa la idea de que apareciendo como políticos moderados y responsables, con un discurso alejado de supuestos “radicalismos” e “izquierdismos”, se pueda frenar la presión de la derecha o sirva para ganar votos en futuras convocatorias electorales. Tiempo le faltó al concejal del PP en el Ayuntamiento de Madrid, Percival Manglano, para recriminar que dos concejales de Ahora Madrid no se hubieran posicionado favorablemente ante su moción: “piden la liberación de un delincuente como Alfón, condenado por portar explosivos, y no para los presos políticos en Venezuela”.
El oportunismo es un camino seguro hacia el mayor de los fracasos y la más grande de las frustraciones. Se puede y se debe plantar cara a la derecha evitando toda sumisión a su discurso, y reafirmando las señas de identidad de la izquierda que lucha en lugar de tratar de diluirlas constantemente. Ese es el mejor camino para defender los logros obtenidos en estas últimas elecciones y seguir acumulando nuevas fuerzas de cara a conseguir la victoria en las próximas generales.
Declaración de la Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales en Defensa de la Humanidad
25/07/2015
La Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales En Defensa de la Humanidad ha conocido la inexcusable noticia [1] del voto de la mayoría de concejales de Ahora Madrid, incluyendo los de Podemos, en defensa de conocidos operadores de la política imperialista de Estados Unidos, de reiterada vocación golpista contra el gobierno legítimo de Venezuela, y enemigos de todas las causas justas de este mundo.
Actuar a remolque del neofranquista Partido Popular supone cuanto menos una incoherencia para cualquier fuerza mínimamente democrática. Pero que además se haga para atacar de manera traicionera a la revolución bolivariana y chavista, permanentemente hostigada por el imperio y la derecha internacional, carece de cualquier justificación política o ética en fuerzas que se consideran en el campo de la izquierda.
El voto de Ahora Madrid contrasta dolorosamente con el “Acuerdo en solidaridad con la justa batalla que libra el pueblo de España ante la aplicación de la Ley Mordaza” aprobado por los diputados bolivarianos en la Asamblea Nacional de Venezuela un día antes. Es doloroso comprobar cómo la solidaridad de los representantes venezolanos ante la lucha que está librando el pueblo español es respondida por los concejales de Ahora Madrid-Podemos apoyando una campaña internacional impulsada por José María Aznar, la Fundación Faes, Felipe González y el grupo Prisa, campaña al servicio de los intereses de las trasnacionales españolas.
El camino electoral, como lo demuestran numerosos ejemplos en América Latina y el Caribe, puede transitarse victoriosamente por las fuerzas populares sin necesidad de ceder en principios que, como la solidaridad internacional y el antiimperialismo, son irrenunciables.
Red En Defensa de la Humanidad