A las 6:30h. de la mañana del 27 de septiembre daba comienzo, en una de las puertas de la factoría de Coca-Cola en Fuenlabrada, un acto en el que participamos medio millar de activistas de la izquierda, jóvenes y trabajadores para arropar y celebrar la entrada de los primeros 85 trabajadores que, a fuerza de lucha y movilización, han recuperado sus puestos de trabajo. Desde GanemosCCOO queremos felicitar sinceramente a esta plantilla que con su ejemplo marca el camino.
Desde que se iniciara el despido fulminante por parte de la empresa de los cerca de 300 trabajadores de Coca-Cola en Fuenlabrada han pasado ya 20 meses. Un ataque que la multinacional quería dejar zanjado de un día para otro, pero que gracias a la determinación de la plantilla se ha convertido en su contrario. Una movilización ejemplar que ha cosechado triunfos y avances día a día; desde aglutinar a su alrededor la solidaridad y simpatía de decenas de colectivos sociales y miles de activistas, hasta tumbar en el terreno legal —hasta en cuatro ocasiones— a los caros y todopoderosos bufetes de abogados que la multinacional había contratado para que dieran una lección a la plantilla.
Todos los intentos de la poderosa multinacional han dado contra el muro de la solidaridad y la movilización; ni los chantajes, ni las maniobras para desmoralizar a la plantilla, ni la táctica de desgaste de meses y meses han conseguido quebrar la voluntad de lucha del que se ha convertido en un referente para todos los sindicalistas.
La lucha continúa: ‘¡No estamos todos, faltan 130!’
A pesar de esta importante victoria, la empresa continúa en su afán de incumplir la sentencia al 100%. Las instalaciones de Fuenlabrada abren sus puertas como centro logístico no como planta de producción, por lo que no todos los afectados recuperan sus mismos puestos de trabajo y condiciones. Por eso, el 27 septiembre, mientras uno a uno los trabajadores se iban incorporando, aplaudidos por sus compañeros, familiares y activistas allí presentes, una de las consignas más coreadas era “¡No estamos todos, faltan 130!”, en alusión a la continuidad de la lucha hasta que todos y cada uno de los trabajadores sean reincorporados a sus puestos de trabajo.
El 10 de septiembre la Audiencia Nacional tendrá que pronunciarse sobre si las reincorporaciones ofrecidas por Coca-Cola se adecuan, o no, a los pronunciamientos judiciales. Las espadas siguen en alto, pero una cosa está clara, los trabajadores, con la lucha, han conseguido doblegar a la todopoderosa multinacional. Esta es la esencia del sindicalismo democrático, combativo, de clase y asambleario que hay que volver a implantar en nuestras organizaciones sindicales.