Gracias a la lucha de los últimos años, especialmente los pasados meses de octubre y noviembre, obligamos al gobierno a retirar las reválidas franquistas. Tal y como se publicó en el BOE del 10 de diciembre, la reválida de 4º de la ESO “no tendrá efectos académicos”, “será considerada muestral” (es decir, se realizará sólo en algunos centros como muestra) y “tendrá una finalidad diagnóstica”, sin ninguna consecuencia práctica para los estudiantes.
Pero desoyendo de nuevo la opinión contraria de la comunidad educativa hacia estos exámenes ilegítimos, y amparándose en la libertad de las comunidades autónomas para decidir sobre esta cuestión, el PP pretende realizar estos exámenes en muchos centros de todo el estado. Incluso allí donde gobierna, como es el caso de la Comunidad de Madrid, pretende obligar a examinarse a todos los estudiantes. Estos exámenes no buscan mejorar la calidad educativa. De hecho, el único efecto que tienen es someter en los últimos días del curso a un enorme estrés tanto a profesores como a alumnos con unas pruebas que, además de injustas, son una forma descarada de poner en duda la labor de nuestros profesores y nuestro trabajo académico como estudiantes.
Es increíble tener que escuchar de boca del ministro de Educación y de muchos dirigentes del PP, como Esperanza Aguirre, Rajoy, Cifuentes y un largo etcétera, declaraciones sobre la excelencia y el esfuerzo cuando cada día desayunamos con nuevos escándalos de corrupción. ¿Qué lecciones de excelencia pueden darnos? ¡No tienen vergüenza!
Hemos conseguido librarnos de las reválidas franquistas gracias a la lucha y no vamos a permitir que nadie nos engañe. Estas pruebas no tienen ningún efecto académico para los estudiantes y no son obligatorias. Por eso hemos llamado a boicoterlas. Hemos realizado repartos de propaganda, reuniones y asambleas en los institutos para promoverlo. En zonas como Madrid, Euskal Herria o Asturias donde ya se han realizado las reválidas ha habido un seguimiento muy alto del boicot, convocándose incluso protestas y concentraciones a la hora de estos exámenes. En Madrid, la organización de padres y madres (FAPA Giner de los Ríos) llamó junto con nosotros a secundar el boicot. Éste es el camino, y llamamos al conjunto del profesorado y a sus sindicatos a que apoyen este boicot, luchando todos juntos contra esta injusticia. ¡Reválidas fuera ya!