Centaurus, uno de los fondos "de alto riesgo" más importantes del mundo, ha fichado a Aznar. Seguramente los apóstoles de la moderación salarial predicarán con el ejemplo y le pagarán una cantidad "simbólica"... Pero ¿qué son estos fondos de los que tanto se habla y qué hay detrás de ellos?
Los hedge funds incluyen una amplia gama de fondos caracterizados por buscar la máxima rentabilidad a través de técnicas agresivas. Los hay que mueven diariamente el dinero por los mercados financieros siguiendo complejas fórmulas matemáticas, los que compran empresas en crisis (Delphi) para liquidarlas o introducir planes de ajuste y revenderlas después, los que intervienen en las OPAs para sacar tajada (en Endesa, o el propio Centaurus con Recoletos y Altadis), o los que "intervienen" en los mercados de materias primas. Domiciliados en paraísos fiscales y generalmente abiertos a pocos y selectos inversores, casi siempre son dirigidos por famosos gestores y sus clientes son los grandes capitalistas y bancos internacionales, lo que les permite además acceder a enormes cantidades de créditos. El sueño de cualquier capitalista: convertir el dinero en más dinero sin pasar por ningún proceso productivo...
No hay que ser un lince para saber que en muchos de estos casos tener "contactos" en la Administración y las altas esferas de los negocios (lo que en el Estado burgués viene a ser lo mismo) puede implicar jugosos beneficios, como prueba la lista interminable de ex ministros que pueblan sus consejos: Madeleine Albraight, John Major, John Snow... Sin embargo nos explican que en el caso de Aznar lo que les seduce son sus conocimientos de geopolítica... Vamos, sólo una cabeza tan bien amueblada cultural e intelectualmente hubiera sido capaz de corretear por las Azores en tan acertada y selecta compañía o participar en intervenciones bélicas con un desarrollo tan brillantemente confirmado. Además, su ojo clínico para identificar autores de atentados causó una gran admiración popular... En fin, que esta explicación daría risa si las decisiones de estos "hombres de Estado" no costaran muerte y sufrimiento en todo el planeta.
‘Capitalismo de amiguetes'
En 1998 saltó a las páginas de los periódicos el fondo LCTM. Impulsado por dos premios Nobel de Economía, tras obtener rentabilidades excepcionales sufrió un colapso. Este par de "talentos" pensó que el diferencial de rentabilidad entre la deuda pública a corto y a largo plazo permanecería invariable. Lógicamente no fue así (lo que nos da una idea sobre el nivel actual de la "Ciencia Económica", pero esto merecería un artículo aparte). ¿Se dejó que el implacable mercado hiciera su trabajo, el fondo quebrara y los partícipes perdieran su dinero como consecuencia del riesgo asumido? Claro que no. Para mantener la "confianza de los mercados" la Reserva Federal americana lideró una operación de rescate. Por supuesto no tenía nada que ver que los clientes fueran los principales bancos mundiales... Casualidades de la vida. Hagan sus apuestas, que la Banca siempre gana.
Según algunos teóricos pretendidamente de izquierdas asistimos a un auge de lo que denominan "capitalismo de amiguetes", que contraponen a lo que sería el capitalismo tradicional y "honrado". Bajo el capitalismo siempre ha existido corrupción, especulación y vínculo entre el poder estatal y los grandes financieros. Si los rasgos más parasitarios y destructivos del capitalismo se han acentuado en los últimos tiempos es precisamente por la decadencia completa e irreversible del sistema. Es doblemente utópico y reaccionario tratar de volver a un pasado que además nunca existió.
En realidad tras estos fondos y sus "consejeros" encontramos a los de siempre: los grandes capitalistas y sus fieles lacayos. Para los marxistas, una de las funciones del Estado bajo el capitalismo es la de administrar los negocios e intereses comunes de los burgueses. Quienes sirven al Capital lo hacen unas veces en las empresas y otras desde el gobierno, la judicatura y demás campos del "independiente" Estado burgués. Los lazos invisibles que unen a esta "élite" son innumerables: desde los colegios donde estudian hasta los restaurantes donde van, les permiten estar siempre en contacto. Es la "sociedad civil" de que hablan.
El caso de Aznar no es sino uno más. Recordemos que Piqué venía de Ercros, que el "socialista" Boyer fue después a servir a las Koplowitz en FCC o el "demócrata de toda la vida" de Martín Villa fue presidente de Endesa.
Estos defensores de la libre competencia que no dudan en usar influencia e información para llenarse los bolsillos, los defensores de la familia que no pestañean al dejar a miles de ellas en la calle para ganar unos céntimos más por acción, los estadistas inflexibles que se arrastran como babosas ante los poderosos... son una parte consustancial de un sistema podrido hasta los huesos.
Los trabajadores, los únicos que producimos la riqueza con la que ellos juegan, nos sacudiremos este tumor parasitario mandándolo al basurero de la historia.