Una conquista para el movimiento estudiantil y el movimiento obrero (Entrevista con el Colectivo Ronda)
El 26 de octubre de 2006 el Sindicato de Estudiantes convocó una jornada de lucha estatal en defensa de la educación y por un futuro digno para la juventud, contra la precariedad laboral y por el derecho a la vivienda. Ese día hubo miles de manifestantes por todo el Estado, pero el hecho más destacado fue la prohibición de la manifestación en Barcelona por parte del gobierno tripartit. El departamento de Interior trataba de impedir que el profundo descontento acumulado entre la juventud tuviera una expresión en la calle utilizando métodos represivos que ni siquiera la derecha (PP y CiU) se había atrevido a llevar a cabo.
Desde el momento en que nos notifican la prohibición, iniciamos una campaña de denuncia pública de lo que eso significa. El SE, con el gabinete de abogados Colectivo Ronda, interpusimos un recurso de amparo en el Tribunal Constitucional (TC) contra esta prohibición. Los derechos democráticos, como el derecho a manifestación, son una conquista histórica de la lucha de los trabajadores, pero como cualquier conquista parcial en el capitalismo, se tiene que reconquistar en el terreno de la práctica constantemente. La prohibición de la manifestación del 26 de octubre significaba un grave precedente, y la sentencia del TC anulando esta prohibición significa, por lo tanto, una conquista para el conjunto del movimiento obrero con implicaciones legales en las próximas manifestaciones que se prohíban, sean o no en medio de un proceso electoral.
Reproducimos a continuación una entrevista realizada a Carme Herranz y Helena Zarco, abogadas del Colectivo Ronda.
El Militante.- La manifestación fue prohibida por el departamento de Interior con la excusa de que había elecciones al parlamento de Catalunya el 1 de noviembre y nos encontrábamos en proceso electoral. ¿Por qué considerasteis recurrir la prohibición?
Colectivo Ronda.- Nos sorprendió mucho, en primer lugar porque cuando notifican al Sindicato de Estudiantes la prohibición no dicen por qué motivo. El hecho de que se prohibía porque tenía contenido electoral, eso lo hemos sabido después, cuándo hemos tenido el expediente. Por lo tanto, de entrada nos encontramos en la indefensión de no saber porque se prohíbe la manifestación.
Y después nos sorprende mucho que se prohíba una manifestación de estudiantes cuyo lema era la defensa de la educación pública, tratándose de una jornada de lucha estatal, y que se prohibía en Barcelona, pero no en Girona ni Tarragona.
Decidimos con el Sindicato de Estudiantes tirar adelante en el muy poco tiempo que teníamos, ya que la notificación del Departamento fue fuera de plazo. La resolución de prohibición se hizo el 20 de octubre pero no se notifica hasta el 23 de octubre, celebrándose la vista del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) el miércoles 25 de octubre, un día antes de la manifestación.
EM.- La argumentación del ministerio fiscal en la vista y la sentencia del TSJC confirman la prohibición de la manifestación. ¿Cuál fue vuestra valoración?
CR.- La sentencia del TSJC dice que la manifestación era un acto electoral, perjudicando la "pureza" del proceso electoral, ya que sólo los candidatos tenían derecho a concurrir, y cualquier otra entidad que no sea un candidato a las elecciones, no podía opinar o decir alguna cosa de lo que se llamaba en campaña. Se argumentaba la protección de los candidatos y partidos políticos en las elecciones, limitando el derecho a reunión, que sólo los políticos tienen derecho a hacer campaña electoral y a hablar de política.
Uno proceso electoral como derecho a participación democrática no puede anular otros derechos, como el derecho a manifestación, porque lo que significa es la vulneración de un derecho fundamental como el derecho a manifestación, rompiendo la pluralidad de manera directa.
Un hecho sorprendente es que la fiscalía en la vista del TSJC defiende la prohibición, y en el proceso del recurso en el TC pasa a defender nuestra posición, es decir, que ha habido una vulneración de un derecho fundamental. Eso es contradictorio, un cambio total de postura en unos meses.
EM.- La repercusión pública de la prohibición fue notoria. ¿Ésta puede ser la razón por la cual la fiscalía, es decir, el gobierno, cambió totalmente la argumentación?
CR.- La motivación del cambio la desconocemos, y no explica en ningún sitio porque cambia de criterio, pero sin duda hay criterios políticos, porque la fiscalía es una misma, con una jerarquía, es decir, los fiscales no son independientes sino que dependen del Gobierno.
EM.- La sentencia del TC ha dado la razón totalmente al SE, anulando la sentencia del TSJC, y diciendo cosas como que en caso contrario "podríamos llegar al absurdo de que durante la campaña electoral estuvieran absolutamente prohibidas todas las manifestaciones". ¿Qué valoración habéis hecho?
CR.- La valoración es muy positiva, de alguna manera viene a retribuir la injusticia que se había llevado a cabo en aquel momento, nos tranquiliza porque parece que no están tan locos, el TC está recolocando los derechos fundamentales, porque de entrada era sorprendente la prohibición.
Toda la sentencia mantiene la idea de que el derecho a manifestación es un derecho fundamental, que no se puede anular por una mera sospecha, diciendo "que podría influir indirecta o subliminalmente".
EM.- ¿Qué implicaciones puede tener de aquí en adelante?
CR.- Cuando preparamos el recurso, buscamos mucho y no encontramos mucha jurisprudencia que interpretara este derecho, sólo otra muy reciente. Ahora si que habrá jurisprudencia para interpretar y definir el contenido del derecho a manifestación no sólo en uno proceso electoral sino en general el derecho a manifestación como idea, como derecho más general. Eso es muy importante.
EM.- Estamos viendo un aumento de la represión policial. Dos ejemplos son la brutal carga policial contra los estudiantes en el desalojo del encierro en la UB, o la represión contra los trabajadores de TMB durante la lucha por los dos días de descanso semanal. ¿Hay un aumento de la restricción de los derechos democráticos más fundamentales?
CR.- Las afirmaciones absolutas requieren uno análisis a fondo que personalmente no hemos hecho, pero sobre todo lo que se está haciendo parece que lo hacen sin que la mayoría de la población lo vea, lo que lo hace especialmente maquiavélico. Sólo vemos lo que nos dejan ver, que es una parte muy pequeña.
En cuanto a las cargas policiales, han sido muy duras, totalmente injustificadas, incomprensible. Precisamente durante aquellos días se había celebrado un juicio contra varios mossos que ha acabado con una sentencia de cuatro años de prisión, y parecía que estaban muy calientes. Políticamente se está utilizando eso para cargar contra el tripartit y contra Saura. Pero independientemente de las lecturas políticas, las cargas policiales son brutales. De hecho, está en marcha una denuncia colectiva contra la brutalidad policial.
EM.- El Colectivo Ronda tiene bastante presencia en conflictos sindicales y de carácter social. ¿Qué impacto estáis observando que tiene la crisis económica?
CR.- Nosotros podemos hablar específicamente en lo referente a particulares, derechos privados, no tanto en cuanto a trabajadores porque los temas laborales los llevan otros abogados del Colectivo Ronda. Lo que estamos viendo es que la gente que se ha metido en viviendas con determinadas fórmulas hipotecarias, ahora están siendo arrasados, en todas sus posibilidades de vida, y no sabemos qué salida darles. Estamos desesperados de ver que nos vienen personas y no sabemos qué salida darles.
En otros países, la legislación hace que devolviendo el piso se extingue la deuda, pero aquí no es así. Aquí aunque pierdas el bien que has dado de garantía, es decir, el piso que te has comprado con esta hipoteca, aunque lo des al banco, como este piso ya no vale lo que el propio banco te dijo que valía entonces, pues la diferencia lo tienes que pagar tú. Das el piso y continúas debiendo. Entonces tenemos desahucios, embargo del sueldo... Son situaciones extremas. En la globalidad de la situación de los últimos años de boom inmobiliario, los únicos que han ganado son los bancos, y la gente está muy mal.
EM.- Por último, muchas gracias por vuestro trabajo y colaboración en esta lucha que hemos librado en defensa del derecho a manifestación.
CR.- Gracias al Sindicato de Estudiantes por vuestra confianza en el Colectivo Ronda.