La huelga del 26 de septiembre convocada por ELA, LAB, ESK, STEE-EILAS, EHNE, Hiru, CGT, CNT y Solidari ha tenido en Navarra una respuesta muy importante. Como reconocen los convocantes no ha sido tan masiva como la del 29 de marzo, en la que convocaban también UGT y CCOO, pero ha sido la mayor huelga en Navarra de las centrales abertzales.
Las centrales convocantes señalan que la huelga obtuvo un seguimiento prácticamente total en la zona Baztán-Bidasoa, una respuesta muy importante en la Cuenca de Pamplona y reseñable en zonas como Estella, Tafalla y Lumbier. En Sakana, una comarca que se está dejando desindustrializar a marchas forzadas, se habla de un paro medio del 90%. En la comarca de Tudela y la Ribera la huelga fue muy pequeña.
Hubo empresas importantes que pararon al 100%, como Portland, Sarrio de Leitza, Arcelor Mittal, Funvera, Schlinder, Sunsundegui, Norton, Kayaba o Jangarria. En otras el paro fue inferior al 70% y en otras como VW fue menor.
En cuanto a la educación, la Universidad Pública de Navarra apenas funcionó, y había muchos estudiantes de institutos en la manifestación de la mañana lo que quiere decir que en el sector educativo se paró, sobre todo en el modelo D. También paró el personal de distintos ayuntamientos, entre ellos Pamplona, Altsasu, Antsoain, Bera, Baztan, etc.
En cuanto al comercio el paro era significativo en barrios obreros como Txantrea (no se veían comercios abiertos por la mañana), Rotxapea y San Jorge. Hubo algún incidente con los piquetes, pero más bien provocados por la represión policial que por otro motivo. La policía (tanto nacional como foral) se empleó a gusto. No respetaron ni a Sabino Cuadra diputado en el Congreso por Amaiur, que como muestran las fotos enseñaba su acreditación para dialogar y lo que recibía eran más porrazos.
Hubo 15 detenidos por distintos incidentes, de ellos 9 menores de edad, que habrá que tratar de que no les pase nada.
Pero del día de huelga hay que resaltar la participación masiva en las manifestaciones que hubo tanto a la mañana convocada por los sindicatos, como por la tarde convocada por los colectivos sociales. Por la mañana cuatro columnas provenientes de los distintos barrios y polígonos confluyeron en la Plaza del Castillo para unirse a los piquetes que habían recorrido el centro de la ciudad. La manifestación, en la que según los convocantes han participado entre 18.000 y 20.000 personas, discurrió en un ambiente de fuerza a pesar de que algunos con los que hablé echaban de menos la unidad de todos para hacer frente con más contundencia a los ataques de la burguesía.
Por la tarde unas 10.000 personas secundamos también la manifestación de los colectivos sociales que cerró en Pamplona la jornada de huelga general. Pero no sólo hubo manifestaciones en Pamplona, también en las distintas comarcas los trabajadores y jóvenes se movilizaron masivamente: Estella (2.000), Tafalla (600), Elizondo (500), Bera (300) y Tudela (500).
Los dirigentes de ELA y LAB que destacaron la participación de la gente, reconocieron que con el apoyo de UGT y CCOO hubiesen sumado más y plantearon que no es el final que este sí que va a ser un otoño caliente si los gobiernos de Madrid y Pamplona no rectifican.
Como los miembros del Comité de empresa de Dana (una de las empresas luchadoras de Pamplona) planteaban a finales de agosto:
“El Comité de empresa de Dana Pamplona, compuesto por los sindicatos: CCOO, ELA, UGT y LAB pedimos y exigimos a todos los sindicatos sin excepción, a todas las organizaciones populares, colectivos sociales que se reúnan y consensúen entre todos las medidas, bien huelga, bien manifestación o cualquier tipo de protesta. Lo que nos une ante las graves agresiones sufridas, el desempleo que están generando, la pobreza y desprotección que están implantando en la sociedad. Esto es mucho más importante que lo que nos separa, y la unión ya no suma sino que multiplica como se vio en la última huelga general. [la del 29 de marzo]
- Si las bases de los sindicatos podemos unirnos, las direcciones también podrán hacerlo.
- Si la derecha rancia, los grandes empresarios, los gobiernos títeres, la banca y quienes manejan los dineros se unen para jodernos, también nosotros tenemos que ser capaces de unirnos, para defender lo nuestro, juntos podemos. Os pedimos vuestra opinión, que salgamos todos y todas a la calle: trabajadores públicos, privados, pensionistas, estudiantes, desahuciados de su vivienda, jóvenes, mujeres, inmigrantes, parados, comités de empresas, dependientes, la ciudadanía en general.
- Por todo ello, exigimos unidad sindical y social para poder ganar, nos jugamos mucho, nosotros apostamos por ello, ¿tú qué opinas?”.
Los compañeros de El Militante también pensamos que si los trabajadores nos unimos en un objetivo común, lo podemos conseguir.