¡Basta de represión policial a los trabajadores que luchamos por nuestros derechos! ¡Libertad inmediata de todos los detenidos!

La lucha del metal de Cádiz está haciendo historia. Hay que remontarse muy lejos para encontrar una movilización de esta envergadura, capaz de plantar cara de forma tan rotunda a una patronal especialmente avara y reaccionaria, y al mismo tiempo enfrentar a esa burocracia de UGT y CCOO plegada por completo a los empresarios.

Y así ha sido. Con ocho días de huelga a las espaldas, con incontables piquetes y haciendo frente a una brutal represión policial, organizando las asambleas más masivas y democráticas que se hayan visto en décadas, con manifestaciones de miles de trabajadores y familias, como la que abarrotó Cádiz el pasado miércoles 25 de junio, la dignidad obrera se ha hecho presente con una fuerza imparable.

Lo ocurrido este lunes 30 de junio en la asamblea organizada por CTM y CGT a las puertas de Dragados en Puerto Real, no solo nos ha emocionado y encogido el corazón, también ha mostrado que el problema no son las ganas de llevar la batalla hasta el final, no es la falta de conciencia de clase, que hay de sobra, que el arrojo y la determinación de cada trabajador por ganar esta lucha es evidente.

La asamblea ha señalado directamente el obstáculo que se presenta ante la clase obrera cuando esta se pone en marcha: ese sindicalismo patronal, de moqueta y paz social, que en los hechos es un instrumento de los empresarios para que sigan amasando beneficios escandalosos, mientras nuestras condiciones salariales y nuestros derechos laborales retroceden.

La firma de un segundo acuerdo de la vergüenza por parte de los líderes de UGT, y respaldado en los hechos por los de CCOO que se han atrevido a acusar a los trabajadores de promover la “anarquía” y saltarse la “legalidad”, también pasará a la historia sí, pero de la infamia.

En un momento en que la carga de trabajo está a tope, este acuerdo nos amordaza durante ocho años. Por eso la patronal está tan feliz, porque se van a forrar literalmente, mientras nos imponen unas condiciones laborales cada día más degradadas.

Los dirigentes de UGT y CCOO han dado la espalda al sentir mayoritario de miles de trabajadores y trabajadoras. Y siguen sin escucharnos, sin ver que ya hemos tumbado en las asambleas dos veces ese acuerdo de miseria. Hoy en la asamblea de Dragados, más de 1.500 trabajadores y trabajadoras hemos vuelto a votar NO a mano alzada contra esta vergüenza, y SÍ a continuar la huelga.

Y cuando nos hemos desplazado pacíficamente en piquete a Puerto real hemos sufrido las cargas violentas de los antidisturbios hiriendo a varios compañeros. Es evidente que aquí también hay unidad de acción entre la patronal y su piquete policial. ¡Esta es su “legalidad” y su orden: la represión!

La provocación policial se ha prolongado durante horas, con los antidisturbios entrando en los barrios de la localidad para detener a seis compañeros e intentar sembrar el terror. Así nos trata el Gobierno del PSOE- Sumar y su ministro Marlaska: no han sacado la tanqueta hoy, pero las porras y las pelotas son iguales de despreciables.

Por nuestro presente y el futuro de la Bahía y de la juventud

Los trabajadores y trabajadoras del metal queremos un convenio digno de verdad, que reconozca desde ya el plus de toxicidad que nos arrebataron. ¿Acaso no realizamos trabajos penosos y llenos de inseguridad? ¿Acaso no han muerto compañeros en los tajos?

Queremos una subida digna de nuestros salarios, digna, que haga frente a la carestía de la vida, a unos precios de la vivienda que son inaccesibles para las familias que trabajamos o estamos en desempleo. ¿Es pedir la luna?

Queremos que se acabe con la precariedad y que se cumpla el convenio en todas las empresas. ¿Somos unos radicales por pedir eso?

Nuestra lucha es por el futuro de la Bahía y por nuestra juventud. Por eso exigimos a esa patronal cerril que tenemos, a la Junta de Andalucía del PP, y al Gobierno central del PSOE-Sumar, que rectifiquen inmediatamente en su desprecio a los trabajadores. Que se sienten a negociar con nuestros representantes legítimos, los compañeros de CTM y CGT.

Los trabajadores de astilleros de Izquierda Revolucionaria y los jóvenes del Sindicato de Estudiantes de Cádiz estamos participando hombro con hombro desde el minuto uno en esta huelga. En los piquetes, en todas las asambleas, impulsando las manifestaciones y aportando nuestras ideas. Y seguiremos estando en esta batalla hasta el final, colocando todas nuestras fuerzas y recursos al servicio de una huelga histórica, que marca un antes y un después.

La lucha del metal es de todo el pueblo de Cádiz y de toda la clase obrera del Estado español. Una huelga que señala el camino para rendir tributo a la memoria de nuestros padres y abuelos, que batallaron sin descanso por el empleo en la Bahía, y cuyo ejemplo lo tenemos en mente a cada minuto.

¡Ni un paso atrás en la huelga del metal!

¡Viva la lucha de la clase obrera!

¡Únete a Izquierda revolucionaria para construir un sindicalismo de clase, combativo y asambleario!

banner

banner

banner

banner

banneringles

banner

banner

banneringles

banneringles

bannersindicalistas

bannersindicalistas