El pasado 28 de junio se celebraron las elecciones sindicales en H&M en Azuqueca de Henares (Guadalajara). En este proceso ha quedado patente el miedo de la dirección de la empresa a que CCOO consiguiera mantener su representación en el comité de empresa, lanzando una furibunda campaña de ataques contra las compañeras y los compañeros que formaban parte de la candidatura de CCOO. Finalmente y frente a todas las presiones, los compañeros consiguieron mantener la composición del comité de empresa que había hasta ahora: siete delegados para UGT y dos para CCOO.

El pasado 28 de junio se celebraron las elecciones sindicales en H&M en Azuqueca de Henares (Guadalajara). En este proceso ha quedado patente el miedo de la dirección de la empresa a que CCOO consiguiera mantener su representación en el comité de empresa, lanzando una furibunda campaña de ataques contra las compañeras y los compañeros que formaban parte de la candidatura de CCOO. Finalmente y frente a todas las presiones, los compañeros consiguieron mantener la composición del comité de empresa que había hasta ahora: siete delegados para UGT y dos para CCOO.

Antecedentes

En el tiempo en que CCOO estuvo en mayoría en el comité se consiguieron múltiples mejoras en las condiciones de trabajo: que se creara un procedimiento para que se adaptara el puesto de trabajo a aquellos compañeros y compañeras que lo necesitaran por enfermedad o accidente, también hoy en día se hacen partes de accidentes supervisados por un delegado de prevención, para presionar a la empresa a que tome medidas para evitar accidentes y, además, si algún trabajador tiene una enfermedad derivada de dicho accidente, con los partes queda reflejado que pasó en el trabajo y posteriormente ante cualquier problema se puede reclamar. Igualmente, desde CCOO se denunció ante los tribunales la injusta imposición de la empresa de ir a trabajar todos los sábados. El juez inexplicablemente dio la razón a la dirección de la empresa y ahora se está a la espera de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha.
El pasado mes de noviembre se realizaron elecciones parciales para cubrir los puestos vacantes en el comité de empresa y ampliarlo, ya que aumentó el número de trabajadores de la plantilla. En estas elecciones UGT ganó la mayoría, después de una campaña por parte de la empresa de acoso y derribo contra las compañeras de la lista de CCOO.

Persecución sindical en H&M

Si en las elecciones parciales la dirección de la empresa intentó evitar que CCOO mantuviera sus posiciones, en esta ocasión ha decidido apostar por atacar directa y abiertamente a las compañeras que encabezaban la candidatura. En primer lugar, el día 2 de junio la empresa impuso una injusta sanción contra Isabel Morales, delegada de CCOO y cabeza de lista de nuestra candidatura, por un supuesto error en el trabajo relacionado con la colocación de unas prendas. Al día siguiente, 3 junio, la empresa decidió ir un paso más allá y comunicó a Vanesa Sánchez, número dos en la candidatura, que no la iban a renovar el contrato que acababa el 14 de junio y que además la prohibían el paso a la empresa a partir de ese día. Incluso, se le prohibió a Vanesa la entrada a un mercadillo de ropa de H&M que semestralmente organiza para sus trabajadores. El mensaje era claro: si estás en CCOO no te irá bien en este trabajo. En un primer momento esta campaña parecía haberlo conseguido: la terrible presión a la que fue sometida la candidatura provocó tres renuncias que junto con el despido de Vanesa hizo peligrar la presencia de CCOO en el comité. Pero a pesar de toda esta campaña de ataques, la mayoría de los compañeros y las compañeras de la lista de CCOO se mantuvieron firmes y consiguieron que el nuevo comité mantenga la representación que había hasta el momento, aumentando el número de votos respecto a las elecciones parciales de noviembre. Es muy importante señalar que la candidatura era completamente internacionalista ya que estaba integrada por dos compañeros de nacionalidad rumana, otro colombiano y otro marroquí, rompiendo con los prejuicios que intenta fomentar la derecha sobre la inmigración para intentar dividir a los trabajadores.
Sin duda, es un éxito importante. No podemos olvidar que atravesamos un contexto marcado por la crisis económica y el alto índice de paro, constantemente utilizado por la patronal para crear un clima de miedo a perder el puesto de trabajo e imponer más ataques, por ello, que CCOO haya conseguido mantener sus posiciones, que son las de un sindicalismo reivindicativo y democrático, es un importante resultado. En todo caso, a pesar de estar en minoría desde CCOO de H&M se seguirán defendiendo los derechos de los trabajadores y trabajadoras de la plantilla.

Solidaridad con las compañeras represaliadas

Hasta ahora, desgraciadamente las delegadas de UGT en la empresa han guardado silencio, impidiendo una respuesta unitaria y contundente del conjunto del comité frente a esta actuación de la empresa. Si hoy UGT permite que la dirección de H&M intervenga en la acción sindical dentro de la empresa, en el futuro estos precedentes se les volverán también en su contra.
Como hemos visto en muchas otras ocasiones, no es suficiente dejar estas campañas en manos únicamente de la justicia burguesa, el punto decisivo para ganarlas es la solidaridad que consigan las compañeras del resto de trabajadores y trabajadoras. Hay que sacar este conflicto fuera de las cuatro paredes de la fábrica y conseguir el apoyo del resto de trabajadores de Guadalajara, en primer lugar. Es necesario que la dirección provincial de CCOO haga una campaña pública en contra de las injustas maniobras de la empresa.
Nuestras compañeras y compañeros de CCOO en H&M tienen el derecho inalienable a ejercer libremente, sin presiones ni amenazas, su actividad sindical. Numerosos delegados sindicales de todo el estado conocemos esta lamentable situación y nos solidarizamos con nuestros compañeros. Si la empresa no cesa de forma inmediata la represión sindical en H&M nos ofrecemos a desarrollar una amplia e intensa campaña de denuncia a nivel estatal.