El segundo día de huelga en Madrid ha sido un calco del primero. Pese a que cada día de huelga supone entre 70 y 100€ menos de salario, el seguimiento del paro se ha mantenido en el mismo nivel que ayer (79% de seguimiento frente al 80% del martes), la demostración más clara de la voluntad de lucha de la Comunidad Educativa.
Lejos de haber sido un estallido puntual de descontento, los profesores se están preparando para una lucha larga que tienen toda la intención de ganar.
En los centros la imagen era muy parecida: encierros, concentraciones a la puerta de los institutos... La inauguración del hospital de Torrejón de Ardoz, de gestión completamente privada y pagado con fondos públicos, no pudo ser totalmente feliz para Esperanza Aguirre. 300 profesores, estudiantes y vecinos la esperaban a la puerta para dar nuestra opinión sobre la privatización de los servicios públicos. A la histórica jornada de huelga del martes le ha seguido una no menos histórica jornada de huelga miércoles. Los únicos que no parecen haberse dado cuenta son Esperanza Aguirre y su telediario.
Por la tarde las centrales sindicales habían hecho un llamamiento a realizar una “cadena humana” frente a la Consejería de Educación. Pese a que en una lucha es básico que cada paso suponga un aumento en la contundencia, como continuación a la masiva manifestación de ayer, los dirigentes sindicales habían convocado un acto más bien simbólico, y así fue entendido por la gente, que no vio la necesidad de participar al mismo nivel.
Pese a ello, más de 5000 personas se encontraban en la calle Alcalá. Tras comprobar que podían rodear la Consejería de Educación varias veces, el objetivo original de la concentración, se decidió cortar la calle. Las consignas de la manifestación previa se volvían a repetir, esta vez con más confianza si cabe. Hasta bien pasadas las 8 se mantuvo la concentración, incluyendo un grupo de unos 200 estudiantes que decidieron continuar la movilización en Sol.
Hoy jueves la huelga continúa con el último de los tres días de huelga de esta semana. Hay que hacer un último esfuerzo para culminar esta semana de lucha por todo lo alto. El gobierno del PP ya ha dado las primeras señales de querer sentarse a negociar. ¡Una nueva demostración de nuestra fuerza! ¡Tenemos que exigir la readmisión de los 3.000 despedidios! La movilización debe seguir hasta que se haya dado marcha atrás en todos y cada uno de los ataques.
¡Todos a la huelga el 22 de septiembre!
¡Organízate con nosotros para continuar la lucha el 6 de octubre!
