En la madrugada del 8 de noviembre fuerzas de élite de la gendarmería marroquí han asaltado y destruido el campamento de Gdim Izik, establecido a 15 km de El Aaiún, donde más de 20.000 saharauis protestaban ante la situación de miseria y opresión a la que les somete el régimen dictatorial de Mohammed VI.