Ausonia llegó a ser una de las empresas más importantes del cada vez más deprimido polígono industrial de Toledo. El cierre de Moltex sería el último de una larga cadena de empresas cerradas o trasladadas en los últimos diez años. Santa Bárbara, Ibertubo, Alcatel y LM entre otras han corrido la misma suerte. En la ciudad se está acelerando el mismo proceso que en todo el Estado: el trabajo industrial en plantilla está siendo sustituido por el empleo precario del sector servicios, carente de cualquier tipo de protección laboral y con salarios de risa y altísimos niveles de temporalidad. Sólo el último año han sido inaugurados dos centros comerciales gigantescos en una ciudad que apenas sobrepasa los 80.000 habitantes. Ese tipo de empleo parece ser el futuro que aguarda a la juventud de nuestra ciudad, si no hacemos nada por evitarlo.